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domingo, 13 de diciembre de 2020

El chico que nunca llamó

Rosie Walsh/ Editorial Plaza Janés/ 384 páginas/ El chico que nunca llamó/ Tapa blanda/ Comprar aquí



Sarah conoce a Eddie, se enamora perdidamente y pasan juntos siete días maravillosos. Ella está convencida de que lo que hay entre ambos es amor de verdad, nunca ha estado tan segura de algo. Así que cuando Eddie le dice que debe marcharse unos días y promete llamarla desde el aeropuerto, Sarah no duda de que lo hará. Pero Eddie no llama ese día. No el siguiente. Ni el otro. Los amigos le aconsejan que lo olvide como él ha hecho y que siga adelante. Sin embargo, está convencida de que ha tenido que pasarle algo que explique su desaparición. Y cuando decide buscarlo, abre sin saberlo una puerta cerrada desde hace mucho tiempo.



¡Buenas mis queridas estrellas! Después de tanto tiempo dispuesta a empezar con los thrillers, por fin me he dispuesto a leerme uno al que ya le había echado el ojo hace tiempo. Si os soy sincera, apenas he leído este género, aunque no por no tener ganas, sino que hay tantos libros de mi género favorito (fantasía), que tengo pendientes que no he encontrado tiempo hasta ahora. 

“El chico que nunca llamó” nos cuenta la historia de Sarah, una chica se ha divorciado de su marido tras tantos años con él. Sus sentimientos se han apagado y al ser incapaz de darle un hijo, eso ha terminado por rematarla. Con el tiempo, Sarah conoce a Eddie, un chico con el que pasa siete días mágicos y se enamora perdidamente de él. Cuando ambos tienen que separarse, Sarah está convencida de que lo de ambos se mantendrá a flote sin importar qué. Pero eso no ocurre, ya que tras esa despedida, Eddie no vuelve a escribirle ni a conectarse por las redes sociales. Sarah está dispuesta a encontrarlo, llegando a un círculo obsesivo por una persona que apenas conoce, y lo que descubrirá tras la desaparición de ese chico al que quiere, descubrirá algo que nunca debió salir a la luz.

Este es un libro que no me esperaba para nada el transcurso que toma. La verdad es que en ese aspecto me ha decepcionado un pelín, ya que me lo esperaba con una trama más turbia y oscura que la que realmente es. Aun así, me he llevado alguna que otra sorpresa, ya que el libro te pinta los sucesos de una manera, hasta que la historia da un giro de ciento ochenta grados que no ves venir. El libro tiene una prosa muy bonita y descriptiva, que te permite imaginar perfectamente todo lo que está sucediendo y cada detalle de los personajes. Sin embargo, tiene un pero muy notable, y es que la trama empieza muy lenta y cuesta engancharse hasta no haber avanzado lo suficiente. Los personajes me han llamado mucho la atención, ya que están hechos de una forma bastante humana, con sus actitudes egoístas y su lado más oscuro. Lo que menos me ha convencido de todo el libro ha sido el enamoramiento, ya que aparte de ser un tanto apresurado de más, la obsesión que se crea a partir de ahí consigue ponerte de los nervios. Se puede entender la preocupación y la tristeza de que la persona que te interesa deje de hablarte, pero no el nivel de dependencia que puedes pillar a una persona que conoces de una semana. Eso me pareció bastante insano y me hubiese gustado un desenlace un poco más acorde a ese detalle.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. Por un lado tenemos a Sarah, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que tras el divorcio de su marido trata de estabilizarse. No sabe bien qué hacer, a pesar de que no le duele haber roto una relación de tantos años, pues sus sentimientos se habían ido evaporando hasta ser solo aprecio y cariño por la otra persona. Cuando conoce a Eddie, en cambio, sí que ve esa ilusión y esa necesidad de estar con una persona que con su ex marido no había experimentado. Solo es una semana, pero para ella fue suficiente para enamorarse de él. Sin embargo, cuando ambos se separan y Eddie deja de escribirle y responder a sus mensajes, Sarah es incapaz de comprender qué ha podido hacer mal. Su amor por él la obsesiona a tal punto de buscarlo por todas partes y escribirle cada día en busca de su presencia. Aunque hacer todo eso solo la llevará a encontrar una verdad que habría preferido no descubrir jamás. Sarah es un personaje que no me ha caído mal del todo. A pesar de sus acciones y de ese amor obsesivo por Eddie, comprendes que muchas de sus actitudes son bastante humanas. Está muy perdida en la vida y no sabe bien qué hacer para encontrar su camino de vuelta a la normalidad antes de conocer a Eddie. Llega a actuar por momentos un tanto psicópata, ya que el no recibir respuesta, la lleva a una espiral de desesperación por encontrar la manera de llegar a él. Lo ve por todas partes, lo busca y su vida empieza a girar solo alrededor de ese chico, al punto de desantender amistades que eran importantes. Cuando empiezas a conocerla en profundidad, entiendes el por qué de muchos de sus comportamientos, ya que está aferrada a no desvelar esa parte de ella que tiene enterrada en su ser. Siendo sincera eran momentos que llegaron a hacerme sentir mucha tristeza por ella. Y luego tenemos a Eddie, del que no puedo hablar demasiado, pero sí puedo deciros un poco su personalidad y lo que ha sido para Sarah. Como bien os dije antes, Eddie es el chico que consigue poner patas arriba la vida de Sarah. Un chico casi perfecto que consigue devolverle la ilusión de amar a alguien. Él es un chico muy amable y educado, que nunca dudaría en hacer lo imposible por quienes quiere, aunque eso lo rompa muchas veces. Al igual que Sarah, se enamora de ella cuando pasan esos siete días juntos y su único deseo es permanecer allí lejos de la realidad que lo espera a la vuelta de su vida. De este personaje vamos a descubrir muchas cosas a lo largo de la historia, que no todo lo que se ve a simple vista es lo que parece y que la verdad que asoma ante él conseguirá romper cada cimiento de los personajes a un punto devastador. 

En resumen, “El chico que nunca llamó” es una novela que ha conseguido tenerme en vilo aunque me costase lo suyo engancharme del todo hasta haber avanzado lo suficiente. La trama no es algo diferente a lo que haya visto en otras historias, pero reconozco que me pilló de sorpresa muchas revelaciones que no me esperaba exactamente así. Los personajes están muy bien llevados y creo que eso es lo que ha hecho de este libro uno más interesantes. Consigues sentir las emociones de todos y meterse en su piel como si fueras tú la que lo está viviendo. El romance no ha estado del todo mal, aunque reconozco que por momentos llegaba a un punto obsesivo que me ponía de los nervios. Me hubiese gustado un punto menos dramático a todo esto y que la protagonista no tuviese un nivel de dependencia tan severa hacia el chico.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela con un thriller de lo más dramático? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!

























 



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