Jenny Han/ Editorial Crossbooks/ 272 páginas/ El verano en que me enamoré [Verano #1]/ Tapa blanda/ Comprar aquí
Belly nunca ha sido la clase de chica a la que le pasan cosas. Año tras año, sus vacaciones transcurren en la casa de la playa pero los chicos apenas se dan cuenta de lo mucho que se fija en ellos. Cada verano, Belly desea que eso cambie. Y, esta vez, lo hará: éste será el verano en que Belly se volverá guapa, el verano en que se enamorará… aunque también será el verano en el que todo cambiará. Para bien, y para mal.
¡Buenas mis pequeñas criaturillas! ¿Qué tal habéis pasado esta Semana Santa? ¿Y el día del Libro? Yo lo he disfrutado todo en Asturias, acompañando a mi pareja, para conocer bien el lugar donde él creció con su familia. Si os digo la verdad, para mí ha sido una experiencia inolvidable, a tal punto que hasta me dolió decirle adiós cuando nos marchamos. No cambiaría esos días por nada en el mundo, porque fueron los mejores del mundo. Aunque también he de decir que el día del Libro lo disfruté allí acompañada de mi actual lectura, "El nombre del viento" y he de decir que la combinación ha sido espectacular.
Dejando a un lado mi emoción por el viaje que he hecho, estoy feliz de poder volver con vosotros y reseñaros varios libros/ mangas en compensación de mi ausencia en el blog. Si os soy sincera quería aprovechar al máximo esos días y no entretenerme con nada más, desconectar de todo en su totalidad. ¿A vosotros no os pasa lo mismo?
Con el libro de hoy, que es una de las trilogías de Jenny Han, reaparezco bastante decepcionada. La verdad es que iba con ciertas expectativas sin haberme leído nada de esta autora, lo máximo que conocía de una de sus obras era la película que Netflix había hecho de "A todos los chicos de los que me enamoré" y me había gustado bastante. Teniendo en cuenta ese detalle, me había intrigado leer la trilogía en la que estaba basada la película y la otra que tenía y de la que vengo a hablar hoy. "El verano en que me enamoré" cuenta una historia desde la perspectiva de nuestra protagonista, Belly, quien desde pequeña siempre había tenido una vida normal. No llamaba la atención de ningún chico, tampoco hacía algo que la hiciera destacar un poco sobre las demás. Solo era ella y nada más. Simplemente Belly. Ella pasa cada verano en la casa de la playa con su hermano, su madre, Susannah, la mejor amiga de su madre y los hijos de Susannah, Jeremy y Conrad. Ellos se conocen desde siempre, con lo que ninguno ha tomado en cuenta que Belly es una chica como tal. Siempre la han considerado como la niña pequeña molesta e irritante que siempre quería la atención de todo el mundo.
Por eso cuando llega el verano en el que Belly se convierte en una mujer hermosa, los chicos dejan de verla con los mismos ojos que entonces y se dan cuenta de que ante ellos tienen a una chica. A partir de ahí, Belly hará lo posible y lo imposible por llamar la atención de uno de ellos: Conrad, su amor platónico e inalcanzable desde que era pequeña.
Este libro fue, sin ninguna duda, una decepción en lo que respecta a personajes y a trama. La historia no nos aleja mucho del típico cliché de una chica que ninguna había llamado la atención y que al crecer y volverse más guapa consigue enloquecer a todos los chicos de su entorno. Ella solo tiene ojos para Conrad, el único chico que nunca ha sabido valorarla y que le ha demostrado y dicho con sus propias palabras que no debía estar a su lado, mientras que al otro, Jeremiah, lo ignora con todo el nombre de la palabra. Belly es, desde el inicio de la historia hasta su última página, un personaje caprichoso, egoísta y sin una pizca de amor propio. Le da completamente igual hundirse a sí misma con tal de recibir una sonrisa del chico que ama. Lo que resulta un poco impactante es que a pesar de amar al chico en cuestión, se pone celosa cuando Jeremiah está con otra chica, lo que termina de hacerla una protagonista bastante odiosa. No ama a Jeremiah, pero se siente con el derecho de sentir celos por querer rehacer su vida. Sin duda una actitud muy infantil de su parte.
Conrad no es un personaje que haya terminado odiando, a diferencia de la protagonista. Tuvo varios momentos que me desagradaron de él e hicieron que quisiera tirarle de los pelos por su manera de querer resolver las cosas, pero comparado con Belly, es menos infantil. Conrad es la clase de personaje oscuro de la historia, ese que tiene demasiados fantasmas y es incapaz de sobrellevar los problemas de su vida diaria. Hay ciertos puntos en los que se entiende por qué le cuesta, aunque no justifica su manera de llevar su vida. Conrad es la clara representación del cliché, un chico malo, que resuelve sus problemas con otras mujeres y con ciertas actitudes...no demasiado sanas para su propio bien. Lo que menos se puede entender del personaje es la forma tan horrible que tiene de tratar a su hermano y a su madre cuando intentan ayudarle a seguir adelante. Son los momentos en los que más mezquino parece. Sin embargo, y como he dicho en otras ocasiones con libros que tienen al mismo personaje, lo que puedo salvar de él es el hecho de que Conrad es un personaje que puede representar ciertos aspectos de la vida real. Una persona que no es capaz de superar un hecho muy duro de su vida y desea olvidarlo de la peor forma posible. Es un personaje del que te compadeces, a pesar de su horrible forma de "curar" y olvidar el dolor.
Jeremiah es el personaje que más cariño puedes tenerle y por el que he conseguido seguir la historia hasta el final. Aunque no le han dado demasiado protagonismo, por ser la protagonista quien narra los hechos y solo sabe hablar de Conrad una y otra y otra vez, puedes entender que a él le gusta Belly desde hace un tiempo. Él, a diferencia de Conrad, ha estado ahí como un amigo, casi como un hermano muy querido para la protagonista. Bromea con ella y considero que han sido los únicos momentos en los que he podido ver a Belly más cómoda y feliz. Sin embargo, y espero que me sorprendan al final y esté equivocada, todos sabemos cómo puede terminar esto en el tercer libro. Jeremiah hace que conozcas un lado más humilde de las personas, un chico que pasa lo mismo que su hermano y que, aun así, es más fuerte que él. A diferencia de Conrad, lleva la situación con fuerza y aunque a veces sufra, se nota que está siendo fuerte por su familia para protegerlos. Una actitud muy valiente y honorable que te hace imposible no querer a ese personaje totalmente.
En resumen, esta novela nos cuenta una historia totalmente cliché y previsible (al menos en su primera entrega), con algunos personajes bastante planos en varios momentos de la novela y una protagonista a la que cuesta entender y soportar.
¡Y eso es todo, mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿vosotros habéis leído ya la primera parte de esta trilogía? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.
¡Nos vemos en la próxima reseña!
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