Piscis pesca a Tauro [Signos de amor #4]

Anyta Sunday/ Autopublicado/ 334 páginas/ Piscis pesca a Tauro [Signos de amor #4]/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Piscis pesca a Tauro. Pero todavía no se ha dado cuenta. Zane Penn, un piscis romántico y creativo, tiene su vida planeada al dedillo: tendrá una primera cita perfecta, se enamorará, se casará y vivirá su felices para siempre. Y todo esto lo hará antes de que le caduque su visado. Beckett Fisher, un tauro paciente y con los pies en la tierra, no cree en el amor a primera vista. Ni en los finales felices. Y, según parece, tampoco cree en el plan maestro de Zane. Pues de eso nada. Ha llegado el momento de enseñarle al guapísimo y magnífico profesor que esas cosas sí pasan. Ha llegado el momento de mostrarle que puede tener un alma gemela, un amigo del alma… Ha llegado el momento de preguntarse por qué esto parece mucho más que una amistad. El soñador de piscis necesitará a un tauro fiel y leal para poner nombre a esos sentimientos nuevos y desconocidos.

¡Buenas mis queridas estrellas! Había que seguir con esta saga que me está conquistando cada vez más el corazón. Por no hablar de que la manera de estos personajes de crear sus romances me están pareciendo de lo más original y especial.

"Piscis pesca a Tauro" nos cuenta la historia de Zane, un dibujante que ama su trabajo más que a nada en el mundo, pero también es un enamoradizo empedernido que está obcecado por encontrar el amor. Eso le lleva a conocer chicas constantemente para encontrar a esa persona que le haga sentir el mundo tambalearse. Todo ello cambia cuando debe irse del piso donde se encuentra y acaba compartiendo piso con un tal Beckett, un profesor de lengua que adora la literatura y los juegos de palabras. Cuando ambos se conocen no pueden ser más opuestos en cuanto a sus propias búsquedas. Beckett ya no cree en el amor y Zane no puede estar más obsesionado con él. Sus diferencias son inmensas, pero es innegable decir que aun así parecen incapaces de apartar la mirada del otro más durante demasiado tiempo.

Este es un libro que tenía muchas ganas de leer para seguir con esta saga que me estoy bebiendo del tirón. Hacía mucho que una saga de libros no me tenían suspirando de esta manera y sobra decir que se están convirtiendo en mis favoritos de la vida y que me va a doler tener que decirles adiós cuando los acabe.

La trama no puede ser más bonita, creo que esta saga tiene el don de usar los clichés más usados y darles una cara nueva. No se me hace repetitivo ni algo que haya visto miles de veces, porque se lleva de una forma original y diferente. Como si los personajes tuviesen una capacidad diferente de sentir este cliché en cuestión. Aquí el cliché de vivir bajo el mismo techo y de polos opuestos que se atraen me ha vuelto loca a rabiar. La manera en que se desarrolla el romance es muy humano y hace que todo lo que sucede entre los protagonistas se va más real que nunca.

Los personajes son otra maravilla más, he empatizado con ambos y los he entendido a los dos. Lo que más me gusta de esta saga es que no juzgas a nadie, porque todos tienen motivos para tener sus miedos y dudas y está llevado de una forma que sus temores están bien enfundados. Además que la pureza que reflejan estas historias atado a la tensión sexual que se respira en el ambiente consigue hacer que te tiemble el alma con ellos. Y estos dos incluso con sus grandes diferencias consiguen demostrar que el amor entre ellos puede ser precioso, sano y real.

La pluma de la autora lo seguiré diciendo y seré muy repetitiva pero la adoro. Siento que con cada libro se vuelve aún más intensa y emocional incluso y eso me encanta porque me permite sentir todavía más a los personajes. Su manera de captarlo todo es una auténtica preciosidad y los adoro demasiado a todos gracias a eso.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Zane, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que es dibujante desde que decidió dejar sus estudios  y seguir su sueño por su propio camino. Sin embargo, tales consecuencias siempre ha hecho que nadie le tome en serio, incluso en lo respectivo al amor. Él se enamora muy rápido de las personas y por desgracia eso termina en que la mayoría de las chicas con las que intenta algo termina con un vano intento de seducción. Y es que Zane quiere casarse y estar con alguien por el mero hecho de compartir su vida al lado de una persona. Por ello cuando se ve obligado a dejar su piso e ir a otro de una conocida de su familia, conoce a Beckett, el hijo de esta, el cual es profesor de lengua y tiene una obsesión curiosa y tierna hacia el juego de palabras. Ambos no pueden ser más opuestos, pero en cambio la amabilidad de Beckett, un chico que parece más roto de lo que Zane imaginaba y el cual le lleva una diferencia de edad considerable, hacen que Zane no pueda evitar sentir una conexión especial con ese chico de ojos azul cielo.

Zane es un personaje que me ha enamorado por completo y me ha tenido suspirando a cada página. Creo que lo he adorado más que a Beckett porque a Zane lo he visto tan dulce, tan bueno y tierno que sentía la necesidad de protegerlo de todo el mundo. Su alegría y efusividad o la manera en que trataba de encajar en aquel mundo o en la vida de Beckett siendo ambos tan opuestos me daba ternura y a la vez tristeza, ya que te hacía ver como al contrario le costaba apreciarse a sí mismo y se sentía menos por no tener la capacidad de compartir cosas con Tauro. Más de una vez me moría de amor por la forma en que Zane idolatraba a Beckett, sobre todo porque lo ves muy real, algo que se nota que no lo está exagerando ni tampoco está mintiendo sobre ello. Ver esa pureza en él, en cómo hace lo que puede para hacer sonreír a Beckett sabiendo lo roto que está me hacía amar más a Zane de lo que ya lo hacía desde el inicio, porque es de esos personajes tiernos que sabes que no puedes dejar de querer pase lo que pase.

Por otro lado tenemos a Beckett, nuestro otro protagonista masculino. De él no os puedo hablar demasiado ya que no tiene punto de vista y muchas cosas de él serían consideradas spoiler. Así que os contaré un poco su forma de ser y lo que me ha parecido en un leve resumen. Él es un chico que es profesor de lengua, ama la literatura y los juegos de palabras. Sin embargo, está completamente roto y nada parece sanar lo que se encuentra dentro de él. Por ello cuando Zane llega a su vida, un joven opuesto a él, más joven y con una capacidad a reír envidiable, Beckett no podrá evitar dejarse arrastrar por esa luz que desprende el contrario y ayudarlo en ese camino para encontrar a la chica de sus sueños antes de que sea demasiado tarde.

Beckett es un personaje que se me ha hecho muy humano y a la vez me ha dado mucha ternura conocerlo por ser del mismo signo que yo. Su historia y transfondo me ha llegado al corazón porque no he podido juzgarlo ante los miedos que va experimentando a lo largo de la trama mientras va conociendo a Zane. Sentía muchas ganas de abrazarlo y protegerlo de todo mal porque no es sencillo volver a confiar cuando la vida te da una patada y por ello ver que lo intentaba con todas sus fuerzas me emocionaba más si cabe. Su relación con Zane y la forma en que era con él se me hacía muy sentida y dulce, como si no pudiera evitar estar cerca de él por el poder que tenía Zane en su vida al iluminársela al llegar a ella. Eso hace que los sentimientos que este refleja te lleguen más y quieras protegerlo de todas esas emociones negativas que otras personas le hicieron creer en su pasado.

En resumen, "Piscis pesca a Tauro" es el cuarto libro de una saga que poco a poco está consiguiendo enamorarme como ninguna otra con todos sus libros, sin excepciones. La trama no puede ser más sentida y bonita y ni hablar de los clichés que encontraremos aquí y que me han resultado preciosos por la forma en que la autora logra que se vean originales a pesar de haberse usado en tantos libros. La forma en que se desarrollan todos los sucesos entre los protagonistas me ha tenido con una sonrisa constante y también con cierto sufrimiento debido a los problemas que cargan a sus espaldas. Los personajes son una auténtica preciosidad al igual que todos los de la saga. Siento que con ellos he visto esa certeza de que por muy diferentes que puedan ser dos personas, eso no es un impedimento para amarse si ambos así lo quieren. La pluma de la autora sigue sin perderse ni un ápice y cada vez mejora más con esa forma de plasmar las emociones y todo lo que están viviendo estos personajes que se van quedando grabados en mi piel.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!