Viajando hacia mi destino [Destino #1]

Abril Camino/ Autopublicado/ 355 páginas/ Viajando hacia mi destino [Destino #1]/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Hace mucho tiempo, Lucía era la chica más alocada de Madrid. Cuando la vida la atropelló, ella decidió convertirse en todo aquello que los demás esperaban que fuera. Ahora, con casi treinta años y a menos de un mes para su boda, se sube a un avión junto a sus tres mejores amigas. Aún no sabe cómo han conseguido convencerla de que recorrer Europa Central durante tres semanas es la forma ideal de celebrar su despedida de soltera. A pocos días de cumplir los veinte, Diego emprende un viaje en tren con su mejor amigo para despedirse de un año desenfrenado de Erasmus y para celebrar que ha conseguido llenar su vida con las tres únicas cosas que le importan de verdad: su familia, su música y una chica diferente cada noche. Una que no le pregunte por su pasado ni pretenda compartir con él más que un rato en posición horizontal. Diego y Lucía se encontrarán en un punto del camino en el que descubrirán que no todos los viajes tienen un destino claro, y que el destino puede, a veces, ser el viaje más emocionante de todos.

¡Buenas mis queridas estrellas! Después de haberme leído solo un libro de la autora, he tenido muy pendiente retomar alguna vez a Abril Camino y ver qué historias nuevas tiene para sorprenderme. Encima siendo tantos libros suyos independientes o muy cortos, me tenía que poner ya de ya con ellos para intercalar mis pendientes.

"Viajando hacia mi destino" nos cuenta la historia de Lucía y Diego, dos personas que deciden emprender un viaje para alejarse de todo lo conocido por un tiempo y celebrar el comienzo de una nueva etapa. Lucía está a punto de casarse y este viaje será el punto y aparte de esa vida de locura y desenfreno que ha vivido siempre. Diego ha terminado el Erasmus y, junto a su mejor amigo Dirk, quiere celebrar el comienzo de sus nuevas vidas lleno de mujeres sin compromiso alguno y la música y su familia, que es lo que más le importa. Tanto Lucía como Diego se conocen en medio de ese viaje y aunque tratan de negarlo, la atracción se vuelve innegable desde el minuto uno entre ellos. Saben que no puede pasar nada entre ellos... ¿Pero cómo se detiene un sentimiento que no deja de crecer?

Este es un libro que forma parte de la bilogía Destino y este es el primer libro. Sinceramente tenía ganas de volver a leer a Abril Camino, ya que solo me había leído un libro de ella y, personalmente, me he llevado un buen golpe con este libro que no me ha gustado nada. No me esperaba que la historia iba a desenvolverse así y la verdad es que me he molestado bastante con los personajes y todo el desarrollo que tiene, ya que no me ha parecido para nada sano ni honorable lo que han hecho.

La trama no me ha gustado y es que ya empezar un libro dejando en claro que va a haber una infidelidad ya es indicativo de que voy a aborrecer la historia. Tiene una forma de llevarse la historia que no me ha convencido nada, menos aún cuando todas las acciones que se supone que se habían aprendido, se van a la mierda por una cosa al final que ocurre y que me ha parecido muy sacada de la manga para tener una excusa de terminarlo todo. Encima hay unos mensajes algo red flag bajo mi punto de vista que no me han hecho mucha gracia y que me ha atragantado el libro.

Los personajes han sido unos completos inmaduros e idiotas en todo el libro. No solo se ponen en plan Disney con sus "te quiero" con solo unos días de conocerse y no saber ni la mitad del otro, sino que encima luego quieres que empatice con una situación muy egoísta donde ambos no están pensando en lo mal que están iniciando todo. Yo nunca voy a quejarme si alguien deja a otro para rehacer su vida porque no le quiere o ya no es feliz, pero una cosa es eso y otra es seguir con las dos relaciones y no decir nada. El romance ha sido un no rotundo para mí y me he molestado bastante con todo lo que se refleja en la historia.

La pluma de la autora no me ha terminado de convencer, la he visto hasta algo simple para mi gusto. Me ha faltado más emoción, más sentimiento y no tanto drama gratuito por todas partes. Lo único positivo es que se lee bastante rápido y no me he dado cuenta de que me lo terminaba por ello mismo, pero es lo único que puedo rescatar de este punto.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Lucía, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que durante toda su juventud vivió sin una sola atadura, recorriendo el mundo sin miedo y dejándose llevar por lo que quería y deseaba. Ahora, años después, todo su mundo se ha estabilizado y ha dejado atrás la chica que alguna vez fue ya que está a punto de casarse con quien se supone que es el amor de su vida y, también, la persona que tuvo a su lado cuando más perdida se encontraba tras la marcha de su madre. Por ello, como última aventura, emprende un viaje con sus mejores amigas como despedida de soltera para recorrer Europa Central y dejarse llevar una última vez. Sin embargo, lo que empieza siendo como una simple aventura sin más intenciones, se convierte en algo más cuando conoce a Diego en medio del viaje. Él también ha decidido recorrer casi el mismo viaje que ellas y es como si el destino los hubiese unido desde el minuto uno. Con Diego, Lucía vuelve a sentir los retazos de la joven que alguna vez fue, esa que estaba dispuesta a comerse el mundo, y le aterra la idea de cometer una locura a pocos días de casarse. ¿Qué es lo que tiene ese chico, varios años más joven que ella, para acelerar su pulso y atraerla como un imán? ¿Podrá mantener sus deseos internos a raya o debería dejarse llevar una última vez?

Lucía es un personaje que me ha puesto de los nervios, me ha cabreado, me ha estresado y he querido abandonar el libro por ella infinidad de veces. Vamos a dejar claro ya para empezar que esta chica tiene una preocupante red flag por todas partes, que es una egoísta, una cobarde y que vive su vida sin pensar una sola vez en las consecuencias de sus propios actos. Además que me hace gracia porque te intercala su presente con su pasado y literalmente no ha cambiado ni un poco, sigue siendo la misma niña pequeña a la que le tienen todo hecho y que se encoña de otro lo bastante para olvidarse de su vida anterior. Ah, pero cuidado, luego no le pidas sinceridad o que arregle las cosas para no llevar a la otra persona a una vida de engaño permanente, mejor dejarlo estar y vivir tu vida con mentiras constantes hasta que se te caiga la cara de vergüenza por ser tan egoísta y mala persona. Hubo un día que yo me quejé de "La magia de ser Sofía" y lo estúpidos y egoístas que eran sus personajes, pero al menos ella tenía cosas que me gustaban. Con Lucía es que no he podido, me parece una caprichosa sin ningún tipo de moralidad, que vive por y para lo que le interesa y cuando se asusta decide huir porque es una completa cobarde que nunca acepta la idea de enfrentar las cosas. Encima me lo intentan medio justificar, cuando eso no tiene perdón, menos cuando van dos veces que comete el mismo error, ella lo sabe y aun así sigue adelante porque así es ella. Una inmadura que cualquiera diría que tiene la edad que tiene.

Por otro lado tenemos a Diego, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que decide emprender un viaje con Dirk, su mejor amigo, para despedirse de un año en el Erasmus totalmente desenfrenado y dar comienzo a una nueva etapa de su vida donde lo más importante para él se ha mantenido a flote. Su familia, la música y las mujeres de una noche son lo único que le importa actualmente, ya que no tiene el menor interés a atarse a nadie por lo que eso supone. Quiere dejar su pasado atrás y que nadie quiera indagar más allá de lo que se ve en la superficie. Pero entonces la conoce a ella, Lucía, y todo lo que creía seguro en su vida se destroza en mil pedazos. Ella es preciosa, atrayente como un imán, pero hay un inmenso problema separándolos: está a punto de casarse. Diego cree que debe mantener la distancia, pero otra parte de él no puede evitar cometer locuras cada vez que la tiene cerca, algo que nunca antes había hecho por una mujer. Por eso cuando ambos empiecen a compartir el viaje juntos, Diego acabará conociendo a una chica que se parece más a él de lo que se esperaba y que las heridas que tienen dentro son más similares de lo que se esperaba. ¿Qué tiene esta chica que se le hace tan irresistible? ¿Y por qué el destino no deja de juntarlos en su viaje para que sus intentos de mantener las manos quietas se vuelva cada vez más y más difícil? 

Diego es un personaje que no me ha gustado nada y eso que la parte de ella también tiene mucho de lo que hablar, pero es que con él siento más rechazo porque no tiene ninguna finalidad salvo ponerse caliente por todo, decir muchas estupideces y ver las cosas de una forma que a veces pensaba que estaba leyendo la versión pornográfica de Disney de un príncipe azul. No tiene un propósito, vive por y para lo más básico del mundo y ni siquiera siento que haya aprendido algo valioso. Se ha quedado estancado dándole sexo a la protagonista y percibiendo las cosas como si se creyera muy gracioso e interesante, cuando la realidad es que solo es un niño que todo en la vida le queda tan grande que necesita llenarlo metiéndose en medio de una relación porque cree estar enamorado. Tiene unas filosofías de la vida un poco preocupantes y ya ni hablemos de la facilidad que tienen todos aquí, sobre todo él, para decir que se puede dejar todo atrás como si nada y a vivir la vida loca. Cuando no se tiene preocupaciones es muy fácil hablar y opinar sin haber cargas de por medio, así que no me extraña que piense algo tan absurdo. Pero vaya, no he sentido ni lástima con el final, era algo que se veía venir pese a los intentos de él de hacer ver todo como si fuera color de rosa y el amor lo pudiera solucionar todo. Un amor de un par de semanas debo recalcar, por si no ha quedado claro.

En resumen, "Viajando hacia mi destino" es el primer libro de una bilogía que sintiéndolo mucho no ha sido para mí en ninguno de los aspectos y que con solo este primer libro ya me ha dejado claro lo poco que estoy de acuerdo con la manera en que se ha querido sobrellevar y resolver las cosas aquí. La trama no ha sido el punto fuerte de la historia, porque a menos que te guste una historia de amor que empieza con una infidelidad en todos los ámbitos, entonces no va a ser tu tipo de historia. La verdad es que yo pensaba que me iba a encontrar una historia de amor compleja, pero no tanto y menos aún que se ahondaría un cliché tan desagradable como este para darle pie al drama de la historia. Encima hay conflictos que ocurren como si estuviera leyendo a niños pequeños que no saben arreglar sus problemas sin liarla más. Y ya ni hablar del drama final, que ha sido una sacada de manga de manual para dar un motivo de peso para sacar un segundo libro. A mí, personalmente, no me ha convencido de ninguna de las formas. Los personajes no se quedan atrás y es que han sido unos inmaduros idiotas en todo el libro. Primero se enamoran a los pocos días de conocerse cuando no saben nada del otro y solo se han dedicado unas cuantas conversaciones y se han tocado mutuamente. Ver que la historia de ambos se desarrolla en torno al sexo (literal que es lo que hacen mayormente en todo el libro) no lo he visto como la muestra de amor que tanto quieren asegurarme que hay. Solo he visto atracción física y deseo y poco más. Quizá un encoñamiento de manual, pero nada más que eso. Porque esa es otra, las decisiones que toman aquí, cualquiera diría que tienen la edad que tienen, porque toman unos caminos que podría haber decidido un niño de seis años y no ellos. El romance es un caos, todo muy red flag para mi gusto y una manera de estropear una historia de amor que podría haber sido bien bonita si no hubiesen puesto ese cliché tan odiado que no sé ni por qué existe. La pluma de la autora no me ha convencido y creo que ha sido por la falta de profundidad que he notado en la historia. Me ha faltado sentir más a los personajes, empatizar más con lo que sentían y no tanto en las descripciones explícitas de sexo desenfrenado. Creo que eso habría ayudado a que les quisiera un poco al menos y que el final me hubiese hecho empatizar con sus situaciones. Pero, sinceramente, lo único bueno que puedo sacar del libro es lo ameno que se me ha hecho leerlo.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!