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lunes, 3 de agosto de 2020

Hana ni Kedamono

Miwako Sugiyama/ Manga/ 50 capítulos [En emisión]/ Hana ni Kedamono/ Online/ Leer aquí





Esa fue la primera vez que me enamoré. La primera vez que conocí "Leopard-kun", el tiempo se detuvo y no podía respirar. Mi pulso se hizo más fuerte y yo no podía apartar mis ojos de él. Aunque Leopard-kun me dijo "que quiere estar conmigo", él es un hombre que ha besado a muchas chicas. Este amor tiene muchas dificultades ... es tierna y dolorosa, pero aún así no puedo evitar que mis sentimientos hacia él. Lo siento ... me enamoré de una "bestia". Este es mi primer amor. 







¡Buenas mis queridas estrellas! Aquí vengo con otro manga semanal y he de decir que, a pesar de haber leído muchas obras de esta mangaka (de las que todavía he de hacer reseñas), esta ha sido una de las pocas que menos he soportado por los personajes y por la manera tan tóxica que tienen de presentar un enamoramiento. 


“Hana ni Kedamono” nos cuenta la historia de Kumi, una chica tímida y muy rezagada a la que le cuesta mostrarse como es debido a lo que ha vivido en el pasado. Esta acción es lo que le provoca ser tan reservada e incluso asustadiza cuando alguien trata de acercarse más de lo debido. Por eso cuando tiene que cambiar de escuela, para intentar hacer frente a lo que le espera, decide ir un día antes al centro para conocer los alrededores un poco mejor. Lo que no esperaba era conocer a Hyou, un chico popular y un tanto mujeriego que la ayudaría a conocer la escuela haciéndole un tour por ella. Sin embargo, cuando ya es hora de despedirse, Kumi descubre que su llavero con forma de oso de peluche ha desaparecido, lo que la lleva a buscarlo desesperadamente. En medio de la búsqueda, aparecerá Hyou, quien le entrega dicho llavero. Sin embargo, eso no acaba ahí, pues él le da su primer beso tras verla llorando, lo que da inicio a una relación peligrosa y de lo más complicada.


Este manga es de esos que encuentro por ahí sin esperar demasiado y que, como tal, no me aportan absolutamente nada a la historia. Los personajes son exageradamente planos y absurdos, incluida la protagonista la cual se pasa cada capítulo llorando por todo. La relación que nos presentan es de lo más tóxica e inviable, desde el inicio sabes que es una historia que no va a ir bien por cómo es el chico. No hay ningún tipo de evolución en toda la trama y el argumento de la historia es exageradamente predecible y cansina. A pesar de ello, y es un detalle que quiero resaltar por otras obras de la mangaka, es que la historia tiene un algo que te hace seguir leyendo hasta el final y probablemente sea por lo fácil que es leer a Miwako. Una historia que no te da nada prometedor o diferente, sino que es un shôjo más como los miles que han sido creados con diferentes personajes y un diferente diseño.


Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. Por un lado tenemos a Kumi, nuestra protagonista. Ella es una chica que ha tenido muchas dificultades en su pasado y eso la ha convertido en alguien asustadiza y tímida con las personas desconocidas. Nunca ha experimentado lo que es enamorarse, por eso cuando conoce a Hyou, todo lo que nunca había conocido empieza a vivirlo en su totalidad con él. Es una chica que llora por absolutamente todo y que no deja de meterse en situaciones comprometidas por su manera tan inocente de pensar. Una chica que siempre ha pasado desapercibida por su aspecto sencillo y su personalidad tan poco llamativa pero que, como pasa en todos los clichés, el chico más popular y atractivo de la escuela se interesa por ella y empieza a enamorarse porque así tiene que ser. En parte reconozco que Kumi me gustó un poco más cuando pasa cierta cosa a lo largo de la trama, que es uno de los porqués que la llevó a alejarse de Hyou, y lo que me hizo verla con algo más de madurez. Aun así, y por lo que he visto a lo largo de la trama porque el manga aun no tiene final, ha vuelto a decepcionarme por ciertos tópicos que han decidido poner en ella. Una protagonista que te deja muy indiferente en cuanto a personajes femeninos y que, sin duda, no he podido disfrutar como debería. Por otro lado tenemos a Hyou, nuestro protagonista masculino. Con este chico, a pesar de quejarme de la trama y de lo cliché de todo, es de los pocos que hacen del clásico chico malo que no me ha desagradado del todo. Quizá en parte es porque los errores que comete no son tan radicales como otros y que suceden, más bien, por la desconfianza de la protagonista y por el pasado que lleva él detrás. Es un chico que siempre ha tenido una vida fácil y todo lo que ha querido lo ha tenido en sus manos. Cuando conoce a Kumi, debido a la inocencia y la ternura que ve en ella, es incapaz de resistirse y la besa. Ahí es cuando empieza a fijarse más en ella y a dejar más al lado a las chicas con las que estaba por mera diversión. Ese ha sido uno de los pocos detalles que he visto diferente, ya que Hyou no niega sus sentimientos por Kumi ni intenta reprimirlos. La única vez que lo intenta es cuando tiene miedo de herirla más por el pasado que carga y decide callárselo para no romperla en pedazos. Tiene un lado bastante inocente, a pesar de ser un mujeriego en potencia, que sale a la luz cuando está con Kumi. Es uno de los pocos protagonistas que decide luchar por la chica en lugar de esconderse en su propio orgullo y eso ha sido un detalle que quería resaltar porque me ha llamado la atención. A pesar de que no soy fan de las historias que obligan a un chico o a una chica a arrastrarse por alguien, casi nunca he encontrado uno en el que el chico sea el que lo haga, lo cual en este caso me ha sorprendido bastante.


En resumen, “Hana ni Kedamono” es un manga con tópicos por todas partes y una historia de amor de lo más tóxica. Los personajes no dejan de retroceder a lo largo de la historia y hay cero evolución en sus personalidades. No deja de ser otra historia de amor de una chica inocente y primeriza en ello que se enamora profundamente del chico malo, aquel que ha estado con miles de mujeres y que no desea ningún tipo de atadura hasta que, CASUALIDAD, la conoce a ella y empieza a descubrir poco a poco lo que es querer a alguien. Soy muy reacia a estas historias donde parecen defender y preferir una relación que no proporciona nada bueno y que el protagonista no deja de ser alguien tóxico y dañino para la chica a una relación más sana y del que también se puede contar algo bonito. 


¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya este manga que nos cuenta la historia del primer amor y sus consecuencias? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!






























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