-->

lunes, 5 de abril de 2021

Si no hay un mañana

Jennifer L. Armentrout/ Editorial Puck/ 384 páginas/ Si no hay un mañana/ Tapa blanda/ Comprar aquí


Lena Wise siempre está mirando hacia el mañana, especialmente al comienzo de su último año de instituto. Está lista para pasar tanto tiempo con amigos como sea posible, para terminar las solicitudes universitarias y, tal vez, para hacerle saber a Sebastian, su mejor amigo desde la infancia, lo que realmente siente por él. Para Lena, el próximo año va a ser épico, un año lleno de oportunidades. Hasta que una elección, un momento, destruye todo. Ahora Lena no está pendiente del mañana. No cuando el tiempo con sus amigos nunca será el mismo. No cuando las solicitudes universitarias se sienten casi imposibles. No cuando Sebastian nunca podría perdonarla por lo que pasó. Por lo que dejó que pasara. Con la culpa creciendo cada día, Lena sabe que su única esperanza es seguir adelante. Pero ¿cómo puede seguir adelante cuando se ha redefinido su existencia y la de sus amigos? ¿Cómo puede seguir adelante cuando el mañana ni siquiera está garantizado?


¡Buenas mis queridas estrellas! Ya tenía ganas de leer otro libro independiente de los que tiene Jennifer y este me llamaba la atención desde hace tiempo. No os negaré que una parte de mí iba un poco con las expectativas de que sería algo similar a "Nunca digas siempre" de la autora, ya que la sinopsis me recordaba un poco a ese. Sin embargo, aunque no me ha parecido una mala historia, se me ha quedado un tanto flojo el mensaje y el transfondo de la trama.

“Si no hay un mañana” nos cuenta la historia de Lena, una chica que ha tenido una vida feliz junto a las personas que más quiere. Lleva enamorada toda la vida de su mejor amigo y cree que es el momento de dar el paso con él y reconocerle sus sentimientos. Sin embargo, su mundo se rompe con un acontecimiento que cambia toda su vida por completo. Ahora Lena no sabe cómo seguir adelante, de qué forma avanzar y cómo decirle a quienes quiere que ha cometido un error que nunca va a poder remediar. Ahora debe afrontar el presente y volver a creer en un futuro, pero ¿cómo hacerlo cuando ya nada tiene sentido?

Este es un libro que tenía en mis pendientes desde hace tiempo. Luego de otro libro independiente que leí de la autora, tenía muchas ganas de ponerme con otro de la misma temática y quizá ese pequeño hype fue el que me llevó a decepcionarme un poco con el libro. Creo que la historia no es mala y que el concepto no está nada mal, me parece un mensaje muy importante y realista que cualquier persona puede experimentar en la vida. Sin embargo, siento que apenas se ha ahondado todo lo que me gustaría y que en ocasiones se pasaba por encima el transfondo de los protagonistas y el crecimiento a nivel personal. El romance me dejó bastante fría salvo alguna ocasión contada, creo que ambos personajes tenían mucha química que habría salido mejor si en los momentos románticos se le hubiese dado más hincapié a la importancia del otro en su vida. La pluma de Jennifer sigue siendo muy amena y ligera de leer, algo que ayuda a leerse el libro en cuestión de horas.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. Por un lado tenemos a Lena, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que siempre ha tenido claros sus objetivos cuando fuese a la universidad pero sigue estancada en cuanto a amor se refiere. Lleva enamorada de su mejor amigo Sebastian toda la vida y cree que ya va siendo hora de confesarle sus sentimientos. Cuando está dispuesta a vivir lo que le queda antes de ir a la universidad y cumplir sus objetivos, un acontecimiento acaba con toda su estabilidad e ilusión. Lena ya no sabe qué hacer y se siente perdida, cree no merecer ningún tipo de felicidad y reniega de todo lo que podría dársela, porque para ella ya no existe un mañana. Lena es un personaje que me ha parecido muy humano. Creo que todos hemos llegado a ser ella alguna vez, una persona que ha cometido un error muy malo que ha provocado una tragedia en cadena y esto nos ha hecho sentir tan culpables que creemos no merecer felicidad de nuevo. Me ha gustado que la autora haya descrito una situación tan humana y a un personaje que comete errores reales, que no están sacados de la manga y que pueden llegar a suceder. En este libro vemos un duelo muy complicado donde aprendemos que para sanar hay que dar el paso de permitirnos a nosotros mismos hacerlo y sobre todo aprender a perdonarnos ante todo. Por otro lado tenemos a Sebastian, nuestro personaje masculino. Él es un chico que siempre ha estado en la vida de Lena y la ha cuidado y protegido de todo mal. Es un personaje muy bueno que siempre ha hecho lo posible por verla feliz, sobre todo tras el terrible acontecimiento. Me ha gustado el carácter de este personaje, aunque a veces me chocase su poca profundidad y crecimiento, me hubiese gustado conocerle más y entender hasta qué punto ha madurado y crecido al lado de Lena. Es de los pocos protagonistas de los que no puedo sacar nada negativo y es que su actitud me ha parecido correcta desde la primera página y salvo un punto que han tenido en común ambos y que debían resolver ambos, al final lo ha llevado de una manera muy adulta y educada que me ha hecho quererlo más todavía. Ha demostrado ser un mejor amigo ejemplar que todos deberíamos tener alguna vez en nuestras vidas y nunca conformarnos con menos que eso.

En resumen, “Si no hay un mañana” es una novela que no ha estado del todo mal y sigue la misma línea de la autora. En ocasiones sentía que al libro le faltaba más emoción y sentimiento del que tenía, sobre todo por el mensaje tan intenso que quiere dejarnos el libro. Los personajes evolucionan bastante y de todos he empatizado mucho con los dos protagonistas por lo que les ha tocado vivir. El romance me ha costado bastante creérmelo. Siento que la autora da pequeñas pinceladas que apenas te permiten disfrutar de esas escenas y que me han resultado algo frías y superficiales. La pluma de la autora sigue en la misma línea y es muy recomendable leerla cuando necesites, sobre todo, una desconexión de tramas muy complejas. Me ha parecido un libro con un mensaje muy bonito que, aunque no se ha profundizado todo lo que se debería, toca un tema muy importante y un tema de autosuperación que me gustaría ver en más libros a futuro.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela con un mensaje de saber perdonarnos a nosotros mismos y ver al mañana? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!

















No hay comentarios:

Publicar un comentario