Solo tres citas... y una mentira

Victoria Vílchez/ Editorial Titania/ 192 páginas/ Solo tres citas... y una mentira/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Cuenta la leyenda que originalmente los humanos poseían cuatro piernas, cuatro brazos, dos rostros y una sola cabeza, y en ellos convivían el sexo femenino y masculino; pero Zeus, sintiéndose amenazado por la fortaleza de estos seres, les lanzó un rayo y los dividió en dos, condenándolos a vivir sin su mitad y a vagar en busca de ella para estar completos. Podría llegar a sonar romántico si no fuera porque, como veréis, mi mejor amiga se había tomado dicha leyenda como una especie de credo y parecía empeñada en que yo también formase parte de su secta. Por cierto, soy Nadia, una mujer independiente, extrovertida, algo friki y con bastante carácter. Y no, contrariamente a lo que pensaba mi amiga, no quería encontrar al hombre de mi vida. Y sí, ya sé lo que estáis pensando: que esta es la historia de cómo termino tragándome mis propias palabras.

¡Buenas mis queridas estrellas! Después de haberme leído uno de mis primeros y favoritos libros de la autora, quería volver a internarme en su pluma pronto por la forma en que me había transmitido las emociones anteriormente. Y decidí empezar con una de sus historias cortitas que, si os soy sincera, me estaba encantando hasta que llegué a esa recta final que me decepcionó.

"Solo tres citas... y una mentira" nos cuenta la historia de Nadia, una chica que no tiene ningún interés en el amor, para ella solo le interesa disfrutar su vida sin atarse a ningún hombre y ser feliz así. Sin embargo, su mejor amiga parece opinar diferente y quiere encontrarle a su alma gemela pase lo que pase.  Y aunque está reticente a acceder a ello, hacen un trato: tendrá tres citas con el próximo chico que le presente y si no consigue enamorarla, dejará de intentar encontrarle el amor. Lo que Nadia no se esperaba es que sería esa misma promesa la que le haría tragar sus propias palabras sobre no estar interesada en enamorarse de nadie.

Este es un libro que me habría gustado bastante si no hubiese pasado lo que la autora decidió hacer en su recta final, cosa que ha hecho que el libro bajase bastante en puntuación debido a ello. 

La trama es bastante sencilla que no tiene algo destacable que no se haya visto en otras ocasiones, pero que te permite despejar la mente de otras lecturas más densas.  Va cogiendo forma desde el inicio y me ha gustado cómo ha empezado desarrollándose entre los personajes y todos los leves conflictos que iban ocurriendo debido a sus personalidades. Sin embargo, mi mayor pero ha sido su recta final, creo que las últimas cuarenta páginas no tienen sentido ninguno y han hecho que la historia dejase de ser lógica porque fue un conflicto que ni siquiera tenía sentido que existiera porque en ningún momento te dejan caer absolutamente nada para pensar que pueda pasar algo así. 

Los personajes me han gustado mucho aunque hayan sido sencillitos y con un transfondo bastante leve por lo poco que se toca en general. El romance me ha gustado hasta cierto punto sin contar esa recta final, pero porque me gustaba ese enfoque hacia lo de las almas gemelas desde un punto de vista tan enternecedor y adorable. El problema es que esa evolución y romance se pierde cuando la recta final crea una situación surrealista que no he conseguido entender por qué sucede ni cómo se ha llegado a ello.

La narrativa es muy bonita como todo lo que escribe esta autora, la cual me parece un refugio para cuando busques leer algo ameno y tierno para despejar la mente y no pensar. Me ha encantado reencontrarme con ella aunque el libro no haya terminado siendo uno de mis favoritos de la autora.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. 

Por un lado tenemos a Nadia, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que no cree en el amor ni está interesada en enamorarse de nadie, pero a quien su mejor amiga no deja de buscarle pretendientes que se acaban volviendo rana a los pocos días.  Sin embargo, cuando está dispuesta a decirle que se detenga, su amiga hace un trato con ella: un chico más con quien tendrá tres citas y tratará de ser amable y si con ello no se enamora tirará la toalla y no volverá a insistirle. Tal cosa atrae bastante a Nadia que accede a ello..., sin saber que eso será su mayor perdición y que terminará conociendo a Raúl, un chico que a diferencia de lo esperado, parece haber nacido para ser su alma gemela.

Nadia es un personaje que reconozco me ha hecho reír en más de una ocasión con sus ocurrencias tan curiosas.Bien es cierto que en ocasiones tenía un carácter algo complicado de sobrellevar, especialmente al inicio que me hacía sentir cierta lástima hacia el protagonista por la forma en que lo trataba, pero me ha gustado ver una actitud diferente a la habitual en un romance y que este personaje diese mayor juego con ello. Su evolución es lo que más me ha fallado, pero que es debido al plot twist y desenlace final que la autora le da al libro y que para mí termina cargándose la esencia que querían dejar en el personaje y que he terminado por no verlo más adelante.

Por otro lado tenemos a Raúl, nuestro protagonista masculino. De él no puedo hablaros porque sería spoiler de toda la evolución que tiene, pero sí he de decir sin resaltar mucho que es un personaje que sorprende mucho porque te engaña a primera vista y que sinceramente no me gustó el desenlace que le han dado porque no lo he visto realista tomando en cuenta todo lo que sucede en la historia misma. Es como si a último momento se le hubiera ocurrido a la autora todo ese drama y me ha dejado bastante fría en mi opinión.

A parte de ellos tendremos a la mejor amiga de Nadia que formará parte de ese enamoramiento de la protagonista y de cómo va desarrollándose y Manu, el hermano de esta última quien tiene un papel bastante importante en la historia aunque al principio la autora quiera despistarnos haciéndonos creer que es un secundario sin más.

En resumen, "Solo tres citas... y una mentira" es un libro que me ha gustado salvo el final que me ha parecido surrealista a más no poder. La trama es muy simple pero a la vez bonita, como si fuese la típica película tierna que ponen en la televisión casi de cuento de hadas, por cómo refleja el tema de las almas gemelas de una forma tan adorable y enternecedora. Los personajes no han estado mal y me han gustado, si no se hubiesen cargado su evolución con ese final que no les ha dado justicia a ninguno de ellos, porque siento que nunca habrían tomado ese tipo de decisiones, al menos no los personajes que yo estaba conociendo. El romance es muy bonito pero se pierde también con ese conflicto final. La narrativa es preciosa como todo lo que escribe siempre esta autora que es mi refugio de libros tiernos y reparadores, de esos que te abrazan el corazón cuando buscas despejarte y simplemente sonreír a cada capítulo.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!