Seis de cuervos #1

Leigh Bardugo/ Editorial Hidra/ 548 páginas/ Seis de cuervos #1/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Kaz Brekker, un genio del crimen que regenta un antro de juegos de azar y apuestas conocido como el Club Cuervo, debe reunir a un grupo de seis personas con las habilidades necesarias para entrar (y salir) de la Corte de Hielo, una fortaleza inexpugnable que mantiene bajo llave un secreto que podría dinamitar el equilibrio de poder en el mundo. Es probable que nadie sobreviva a esta misión, pero si quiere hacerse rico más allá de lo que alcanza su imaginación, Kaz va a tener que jugárselo todo a una sola carta. Y esa carta es un Seis de Cuervos.

¡Buenas mis queridas estrellas! Llevo atrasando este libro la vida entera, no por falta de ganas, sino porque sabía que una vez me internase entre sus páginas, salir iba a ser imposible.

"Seis de cuervos" nos cuenta la historia de Kaz, un temerario e inteligente genio del crimen que no le teme a nada, salvo a las sombras que en ocasiones le persigue. Él lidera un antro de juegos de azar llamado Club Cuervo y al mismo tiempo posee un grupo de fieles que lo ayudan a cumplir sus más descabelladas misiones. Todas aquellas que ofrecen una buena suma en efectivo que pueda satisfacerlo a él. Lo que no esperaba era que de todas las misiones que llegarían a él, aquel día aparecería una de las más descabelladas del mundo. Necesita un grupo de seis personas para conseguir ingresar en la Corte de Hielo y poder salir indemne de ello para encontrar a una persona. Todos saben que aceptarlo es una locura, pero Kaz no duda a la hora de reunir a las seis personas más perfectas para llevar a cabo su plan. Uno que, de lograrlo, los convertirán en los mejores ladrones del mundo entero.

Este es un libro que no me esperaba para nada que me fuera a gustar a tal nivel y es que no he podido soltar el libro en ningún momento. Bien es cierto que hay momentos en el inicio que se me hicieron un poco lentos pero porque la presentación de cada personaje es amplia y puede hacerse algo tediosa, pero después lo agradeces porque la evolución de cada uno te muestra lo necesario que era esa introducción lenta.

La trama es el punto más flojo del libro en mi opinión. No es horrible ni tampoco mala, simplemente no reluce de la misma forma que lo hacen los personajes, ya que el transfondo o la forma en que se desarrolla todo es mucho más predecible salvo en la recta final que es lo que más consigue sorprenderte del libro. Se puede hacer algo lento al inicio hasta que no empiezan a desarrollarse las cosas, pero una vez avanzado todo te bebes el libro en nada.

Los personajes son para mí lo mejor que tiene este libro con muchísima diferencia. No puedo ponerle una pega a nadie ni tampoco a ninguna de las decisiones o reacciones de cada uno de ellos porque todas son acordes a la personalidad de la que la autora nos ha avisado. No hay moralidad en estos libros y tampoco esperéis ningún tipo de redención, son personajes completamente grises con sus luces y sombras que pueden enternecerte al mismo tiempo que erizarte la piel. Y los romances aunque no puedo ahondar en ellos por spoilers, me han dado la vida y despertado mi lado fangirl total.

La pluma de la autora me ha gustado pero sí que es cierto que una de las cosas que siempre me cuesta coger bien de ella es su forma de extenderse cuando narra los escenarios o los atuendos o algo que se puede hacer un poco denso y difícil de disfrutar. Fuera de eso, a nivel emocional ha sido una brutalidad y se nota la evolución de ella luego de la trilogía Grisha.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Inej, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que vive bajo el apodo de "Espectro", nombre que heredó una vez que acabó trabajando para Kaz. Es silenciosa como una sombra y nadie puede verla, lo que le permite trabajar en todo aquello que precise un absoluto sigilo o una inmensa agilidad. Es la mano derecha de Kaz prácticamente y allí donde va él, va ella, después de todo fue el chico que la salvó a sus ojos, aunque fuera de esa emoción sepa que los motivos pudieran ser meramente de intereses propios. Ahora, una vez más, una misión llega a ellos y aunque Inej tiene sus dudas respecto a cómo se las arreglarán en esa Corte de Hielo con una de las protecciones más inexpugnables, confía en Kaz y sabe que de una forma u otra los sacarán a todos de allí. Pero, ¿bajo qué costo?

Inej es un personaje que desde la primera página y punto de vista de ella sabía que iba a volverse mi protagonista femenina favorita. He conectado mucho con ella, con esa perseverancia y la forma en que protege a los suyos con uñas y dientes. Además se me hizo muy bonito ver la evolución que va teniendo a lo largo de la trama, de pasar a cargar con un pasado horrible que vivió en su piel, a experimentar y crecer en busca de lo que realmente desea hacer. Me ha encantado ver la manera en que no se rinde ante nada y la conexión que tiene con Kaz, al punto de que no necesitan decirse nada para entenderse a la perfección. Estoy deseando ver más de ella y de lo que tiene planeado a futuro y ver esa explosión de crecimiento en un personaje que, para mí, es de los que más cariño se ha ganado de mi parte.

Por otro lado tenemos a Nina, nuestra otra protagonista femenina. Ella es una chica que toda su vida ha vivido entre odios, ya que consideran a los Grishas una raza miserable que debería desaparecer de la faz de la Tierra. Ser una Mortificadora no es sencillo y menos cargando con un pasado demoledor y angustiante como el de ella. A pesar de ello, Nina no se rinde y cuando Kaz va a buscarla para unirse a su nueva misión y descubre a dónde quiere ir no duda en acompañarlo. Y es que todo el pasado de Nina regresará a partir de un solo nombre: Matthias. La única persona del mundo a la que es incapaz de ver luego de haberlo traicionado cruelmente. ¿Podrá limar las asperezas entre ambos o será ya demasiado tarde?

Nina es un personaje que me ha encantado en este libro aunque no haya sido mi favorita de las dos chicas. A pesar de eso es increíble la capacidad que tiene de reaccionar a todo y la gran fortaleza que tiene en su carácter, lo que la mantiene estable incluso cuando alguien busca romperla en pedazos. Me parece una mujer digna de admirar tomando en cuenta todo lo que carga a sus espaldas y por la maldición que la persigue siendo una Grisha, raza que es tan odiada y despreciada. Me daba demasiado dolor ver que lo único que ella quería era volver a Ravka, a su hogar, donde nunca más sería despreciada porque estaría con los suyos. Y ver las interacciones que Matthias y ella poseían juntos era demoledora. un enemies to lovers en toda regla que consigue encogerte el corazón y hacer que desees que ambos arreglen esas diferencias que impiden que hablen las cosas que quedaron abiertas entre los dos.

Luego tenemos a los chicos de la misión. Por un lado está Kaz, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que regenta un antro de juegos de azar llamado el Club Cuervo y también lidera el grupo de Los Despojos, quienes lo ayudan a cumplir las misiones que no puede hacer él solo. Cuando una nueva misión, imposible a ojos de cualquier otro, llega a sus oídos, Kaz toma la decisión de hacerlo: ingresar a la Corte de Hielo más inexpugnable del mundo, liberar a alguien necesario, y volver sano y salvo. Pero para ello va a necesitar a seis personas que lo ayudarán para cumplir esa misión de la que necesita las mejores habilidades posibles. Con lo que no cuenta, claro está, es que va a necesitar mucho más que sus astucia y sus compañeros para lograr salir de esa prisión de la que nadie puede volver a salir una vez que entra. ¿Podrán conseguirlo?

Kaz es un personaje que sabía desde el inicio que iba a enamorarme como ningún otro. Los personajes altamente inteligentes y con una capacidad de hacer que a pesar de su baja moralidad consigas quedarte sin respiración con él. En más de una ocasión, lo reconozco, he vuelto a releer algunas escenas suyas donde deja salir esa perspicacia que me encanta de él. No es un personaje sencillo ni tampoco vais a ver bien muchas de las cosas que hace, porque no es alguien que tome elecciones bonitas o propias de una buena persona, sino todo lo contrario. Me ha gustado también esos momentos donde se ve que lo subestiman por su invalidez debido a que tiene que moverse con un bastón, pero en cambio él les demostraba que a veces no se necesita buena fortaleza o cuerpo intimidante para vencer y es que Kaz tiene lo que más debería temerse: muchísima inteligencia.  Su relación con Inej me vuelve loca a rabiar y todo lo que engloba el pasado de él consigue dejarte sin aliento de lo horrible que llega a ser en muchos momentos, sintiendo la angustia de Kaz como la tuya.

Por otro lado está Matthias, otro de los protagonistas masculinos. Él es un chico que pertenece a los drüskelle, una raza que odia profundamente a los Grisha por todo lo que esa raza con poderes puede llegar a significar en sus vidas como peligro. Él está encerrado en una de las prisiones más protegidas del mundo, de la que salir es un sueño imposible y consigue hacerlo cuando Kaz y el resto logran ayudarlo. Con lo que no contaba era que entre ellos estaría Nina, la única mujer en el mundo a la que se niega a ver otra vez luego de haber sido traicionado por ella de la forma más vil y cruel posible. Matthias solo tiene clara una cosa desde que se encuentra en aquella prisión y es que se vengaría de ella costara lo que costase, aunque con ello tenga que morir en el intento.

Matthias es un personaje que me ha gustado pero con el que he tardado en congeniar porque su odio y sus prejuicios, aunque estaban enfundados a través de su raza y lo vivido, me resultaban algo agridulces. Y es que siento que es un personaje que puede dar aun más juego de sí en el siguiente libro, sobre todo ahora que su evolución ha sido tan significativa en mi opinión. Me hubiera gustado ver más puntos de vista de él, porque creo que hasta ello habría ayudado a que conectase más con el personaje y lo que ocultaba dentro de toda esa frialdad de fuera. Sus interacciones con Nina han sido increíbles, creo que son los que más pasión han desbordado en su odio y en la forma en que no dejaban de picarse para mal, buscándole los puntos débiles al otro para provocarle el daño que habían sentido del contrario. 

Y por último tenemos a Wylan y a Jesper, los cuales tienen un poco menos de protagonismo en la historia, pero son igual de importante. Wylan es un considerado "hijo de papá" que siempre lo ha tenido todo pero que por motivos desconocidos se escapa del nido familiar y acaba reuniéndose con aquellos cinco ladrones que pueden ser todo lo opuesto a lo que él conoce hasta ahora. Mientras que Jesper es un pistolero que lo único que busca es darle a su padre una vida tranquila con el dinero que consiga, para que de esa forma no tenga que preocuparse más por él ni por la granja que su familia tiene, ya que debido a que Jesper era un jugador que perdía todo su dinero llegó a perjudicar seriamente a su familia.

Jesper es un personaje que me ha gustado mucho aunque me he quedado corta de conocerle bien. Siento que en el segundo libro veré más de su crecimiento, ya que en la recta final se intuía que lo que viene de él va a ser fuerte e intenso. Tengo mucha intriga ya que su personalidad me gustaba bastante y me generaba mucha ternura al leerlo, sobre todo en todos esos momentos que estaba cerca de Wylan.

Wylan es un personaje que sabía iba a enamorarme como ninguno otro pero a nivel ternura. También me he quedado corta con su evolución aquí y al igual que le ha sucedido a Jesper presiento que veré su crecimiento dentro del segundo libro tomando en cuenta que el final del primero se quedó con una parte importante de él. Es super tierno y ver como dentro de Los Despojos es como el alma más pura e inocente me mataba de amor a cada segundo. Y las interacciones de Jesper y él simplemente me daban años de vida, tampoco lo voy a negar.

En resumen, "Seis de cuervos" es un libro que inicia una bilogía que no va a decepcionaros. Creo que me arrepiento bastante de haberlo dejado durante tanto tiempo en mis estanterías sin leer porque ha sido una auténtica gozada. La trama es el punto menos fuerte del libro. Todo lo que sucede no destaca por ser mega original, pero aun así te mantiene inmerso y con curiosidad de ver cómo van a resolver todo los personajes de inicio a fin. El principio se puede hacer muy lento porque apenas ocurre nada y a mí al menos se me hizo algo bola, pero la recta final es un no parar de emociones y situaciones que te dejan sin respiración. Los personajes han sido el mayor plus del libro, sobra decir que me han maravillado y que todo lo que vas descubriendo de ellos es necesario para la evolución que va teniendo y todo lo que les va pasando a lo largo del libro. Sus respectivos romances me tienen chillando bastante porque creo que la química es otra de las cosas increíbles que me ha dado el libro y que tengo ganas de seguir viendo cómo evolucionan en el siguiente. La pluma de la autora me ha gustado a nivel emocional, porque a diferencia de la trilogía Grisha siento que aquí mejora mucho en ese sentido y puedes comprender mejor las emociones de cada personaje y todo lo que llevan dentro, pero a nivel ambientación me sigue pareciendo que Leigh abusa un poco de las descripciones. Muchas veces me abruma tanta descripción para explicarme cómo es un atuendo o una habitación que seguramente no volveremos a ver en la vida y es el mayor fallo que le veo.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!