La teoría de los Archipiélagos

Alice Kellen/ Editorial Planeta/ 288 páginas/ La teoría de los Archipiélagos/ Tapa dura/ Comprar aquí

«La teoría de los archipiélagos viene a decir que todos somos islas, llegamos solos a este mundo y nos vamos exactamente igual, pero necesitamos tener otras islas alrededor para sentirnos felices en medio de ese mar que une tanto como separa. Yo siempre he pensado que sería una isla pequeñita, de esas en las que hay tres palmeras, una playa, dos rocas y poco más; me he sentido invisible durante gran parte de mi vida. Pero entonces apareciste tú, que sin duda serías una isla volcánica llena de grutas y flores. Y es la primera vez que me pregunto si dos islas pueden tocarse en la profundidad del océano, aunque nadie sea capaz de verlo. Si eso existe, si entre los corales y sedimentos y lo que sea que nos ancla en medio del mar hay un punto de unión, sin duda somos tú y yo. Y, si no es así, estamos tan cerca que estoy convencido de poder llegar nadando hasta ti».

¡Buenas mis queridas estrellas! Cuando vi que Alice Kellen sacaba nuevo libro me emocioné mucho, sobre todo porque el estilo me recordaba mucho a "El chico que dibujaba constelaciones", uno de mis favoritos de la autora.

"La teoría de los Archipiélagos" nos cuenta la historia de Martín e Isaac, dos personas totalmente opuestas que se encuentran en el momento y lugar menos esperado posible. Martín se va una temporada de viaje a la casa de su jefe, a las afueras de todo lo que conoce, para que el cambio de aires le inspire a hacer mejor su trabajo. Lo que no imagina es que allí conocerá a Isaac, su vecino gruñón pero totalmente libre que empezará a provocarle unas emociones que jamás imaginó tener hacia un hombre. Esta es la historia de un amor de verano, de un reencuentro doloroso y de que a veces las segundas oportunidades no son tan imposibles como llegamos a creer.

Este es un libro que me ha llegado más al corazón de lo que me esperaba. No negaré que iba con cierto miedo porque me había creado unas expectativas respecto a la historia y temía que no se cumplieran, pero no ha sido el caso. Y es que aunque no sea de mis favoritos de la vida de la autora, sí que es cierto que ha conseguido llegar a mi corazón y dejarme este muy blandito y emocional.

La trama es sencilla pero a la vez compleja. Vemos una historia intercalada en varios puntos en el tiempo, algo que Alice Kellen suele hacer en sus libros. Por un lado vemos la historia de nuestros protagonistas, cómo se conocieron y todo lo que vivieron, y por el otro vemos el presente, a ambos de ancianos y con muchas asperezas que limar por una decisión dolorosa que se tomó. Me ha gustado mucho ver la manera en que se reflejan las emociones aquí, tan al estilo de la Alice con la que empecé a leer sus libros y es algo que me ha encantado. Lo que quizá me ha fallado es que me hubiese gustado leer más de ese futuro, ya que siento que termina de forma muy abrupta y por ello no le he dado la nota máxima.

Los personajes me han encantado, con sus errores, con sus aprendizajes, con esos miedos que a veces nos encierran en una monotonía que no tenemos porque seguir. Siento que ambos son un claro ejemplo de que muchas veces dejamos pasar la vida sin hacer nada con ella, solo seguir la corriente. Y aquí vemos esa lucha por ir a contracorriente, por vivir, por sentir por primera vez y aunque sus personajes cometen errores, porque lo hacen, me han hecho sentir más de lo que me esperaba. El romance es muy pasional, muy fuerte y de esos que marcan huella para toda la vida.

La pluma de la autora mantiene esa esencia de cuando escribía sus primeros libros, con lo que me ha enamorado y llegado mucho al corazón. Me encanta que las emociones estén siempre tan presentes en sus libros y aquí las he sentido en la piel dejándome muy blandita por dentro.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Martín, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que siempre ha vivido a corriente del resto, nunca ha hecho nada diferente, siempre se ha dejado guiar por todo aunque muy dentro suya desea correr y ser libre por una vez en su vida. Cuando su jefe le ofrece irse a su casa de verano para encontrar la inspiración y hacer su trabajo correctamente, conoce a Isaac, un chico gruñón y totalmente libre que ama las flores y que lo ayudará a terminar su trabajo antes del plazo límite. Lo que nadie le dijo es que en medio de ese verano descubriría lo que es vivir sin miedo, lo que es arriesgarse y experimentar lo nunca experimentado. Y a respirar por primera vez sin sentir que los pulmones le arden por el esfuerzo de seguir una vida que no termina de encajar con él. ¿Qué les deparará a ambos en su historia de amor?

Martín es un personaje que me ha gustado mucho, ya que de los dos es con el que más ahondan. Siento que sus emociones son muy realistas y humanas, ya que te permiten ver lo que es ser una persona a la que siempre han dado por hecho que no va a lograr nada en su vida. Me dolía en el alma darme cuenta de que nadie veía de verdad a Martín, que todos daban por hecho que era una persona simple y no se molestaban en ver su interior, ese mundo que brillaba por sí solo cuando hablaba de verdad, y por eso su relación con Isaac me caló mucho aunque las circunstancias en las que nace no me gustasen tanto. Quizá eso es lo que manchó un poquito la relación de ellos bajo mi punto de vista, pues se me hacía algo injusto lo que sucedía entre ellos con algunos sucesos sin resolver.  Aun así, creo que es un personaje con una gran evolución y un transfondo intenso que ha logrado dejarme una sensación cálida en el corazón.

Por otro lado tenemos a Isaac, nuestro otro protagonista masculino. De él no puedo hablaros demasiado porque no se ahonda en lo que él ha vivido hasta casi la mitad del libro y sería spoiler, así que os hablaré brevemente de él y os daré mi opinión sobre su personaje. Él es un chico que ama las flores, las cuida, conoce cada detalle de ellas y adora su tiempo dedicado a cuidar el jardín de su casa. Un día, Martín llega a su vida para pedirle una ayuda totalmente inocente: que le enseñe el lenguaje de las flores medicinales y sus significados para un diccionario que tiene que hacer de ellas. Lo que él no esperaba era que de todas las cosas que podrían llegar a suceder era que Martín se fuese incrustando en su piel, aunque sabe que no es posible, que hay demasiados inconvenientes para que su historia sea siquiera posible, pero Isaac quiere poner la mano en el fuego por esa historia que ya ha empezado a ser escrita, esa por la que él arriesgaría el intento todos los días de su vida.

Isaac es un personaje que me ha sorprendido mucho, porque aunque inicia la historia y te transmite la esencia de un completo gruñón, al final se hace de querer. Me ha gustado ver la forma en que al igual que Martín va creciendo su propio transfondo, aunque quizá la de él ha sido más corta y simple lo que me ha dejado con ganas de haber podido saber más. Su transfondo es muy intenso al igual que todo lo que siente y hace a lo largo de su vida. Es un personaje libre, sin ataduras, que va de un lado a otro sin que nada ni nadie lo detenga, hasta que Martín rompe un poco esos esquemas con su arte, su personalidad tranquila y esa capacidad de abrirle los ojos a un sentimiento que nunca había estado tan fuerte en su interior. Siento que esas historias donde los personajes son tan opuestos me encantan, porque transmite esa sensación bonita del otro por conocerse, por aprender a amar cada detalle del contrario aunque no coincida con la suya.

En resumen, "La teoría de los Archipiélagos" es un libro que muestra lo que es enamorarse de una forma mágica y única, pero también a ver el alma de cada uno, lo que esconde cada persona y que ninguna, por mucho que su carácter sea más o menos tranquilo, es realmente "simple". La trama es preciosa aunque sea tranquila, ya que nos cuenta una historia de amor de verano y todos los aprendizajes que los personajes sacan a través de ello. Me ha encantado el hecho de que Alice vuelva a hacer ese intercalo de pasado-presente que te permite ver la historia que unió a ambos personajes y el reencuentro de estos muchos años después en el futuro. El romance me ha gustado bastante, aunque quizá lo que más me ha fallado ha sido esa forma en la que empieza por la vida que hay detrás de uno de ellos y que no vi justo. Lo que sí reconozco es que no le di una nota máxima porque me hubiese gustado que ahondasen más en ese futuro, en ese reencuentro y que no acabase de forma tan abrupta. Los personajes me han gustado bastante y es que son tan imperfectos que cuando estaban juntos eran perfectos para el otro, con sus grandes diferencias, pero remarcando con ello que eran ideales para el otro. Es una de las cosas que adoro de Alice y es su capacidad de hacer romances tan opuestos pero que aun así pegan tan bien, como si fuesen un equipo capaz de lograrlo todo. La pluma de la autora siempre me encanta y aquí por ejemplo he sentido la esencia de sus primeros libros, detalle que me ha dejado una sensación cálida por dentro por la nostalgia de leer algo similar a uno de mis libros favoritos de la autora.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!