Amor en juego [Long Game #1]

Elena Armas/ Editorial Grijalbo/ 448 páginas/ Amor en juego [Long Game #1]/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Adalyn Reyes siempre ha estado centrada en los Miami Flames. Sin embargo, su impecable carrera se ve afectada cuando el vídeo de un altercado con la mascota del equipo se hace viral. En consecuencia, el dueño del club (que casualmente es también su padre) la manda a un pueblo en mitad de la nada para que reflote el equipo de fútbol local. Adalyn está dispuesta a dejarse la piel para conseguirlo, pero no contaba con que sus jugadores serían un grupo de niñas de nueve años con tutú y una cabra como mascota. Además, Cameron Caldani, exportero y leyenda del fútbol, también se encuentra en el pueblo, aunque su presencia allí es todo un misterio. Cam es el candidato perfecto para ayudarla, pero después de un primer encuentro un tanto accidentado (quien dice «accidentado» dice «lo atropellé con el coche»), en los planes del futbolista de élite solo cabe deshacerse de ella cueste lo que cueste. Sin embargo, marcharse no es una posibilidad para Adalyn, que no descansará hasta recuperar su antigua vida. Con o sin la ayuda de Cam.

¡Buenas mis queridas estrellas! Otro libro más que me acabo de la autora y me sigue sorprendiendo la capacidad que tienen de engancharme sus historias aunque tengas una barbaridad de clichés por todos lados. Sí que es cierto que este no es mi favorito y que sigo prefiriendo el de Farsa de amor a la española, pero me ha tenido igual de enganchada e intrigada por avanzar más.

"Amor en juego" nos cuenta la historia de Adalyn y Cameron, quienes no pueden ser más opuestos. Adalyn ha volcado toda su vida únicamente en los Miami Flames, buscando demostrar a todos y a sí misma que puede ser útil. Sin embargo, un altercado bastante desagradable que ocurre entre ella y la mascota del equipo de fútbol se vuelve viral a través de un vídeo y hace peligrar la profesionalidad de su trabajo. El dueño del club, es decir su padre, decide mandarla fuera una temporada a un pueblo perdido para que mejore las capacidades de un equipo local para demostrar que puede ser útil para ellos. Sin embargo, Adalyn tiene varios problemas: el primero es que el equipo resulta ser de niñas de once años poco profesionales; el segundo es que su hogar provisional es una auténtica choza y la tercera y más importante es Cameron. Él es un exportero muy popular que un día desapareció sin dejar rastro y con el que no ha empezado con buen pie tomando en cuenta que son vecinos. Adalyn solo quiere recuperar su antigua vida y Cameron solo desea que se vaya del pueblo lo antes posibles. ¿Pueden acaso dos polos tan opuestos coexistir entre sí?

Este es un libro que me ha sorprendido bastante, sobre todo porque pensaba que lo que me había sucedido con "Farsa de amor a la española" había sido casualidad, pero no. Realmente la autora me gusta bastante cómo escribe y la forma en que logra transmitir las emociones de una forma tan profunda y real. Además que no pude dejar de leer y tenía que frenarme a mí misma para no ventilarme el libro en unas horas.

La trama me ha gustado mucho aunque haya sido un cliché constante, porque todos los sucesos te los ves venir y te esperas lo que va a pasar desde el inicio. Sin embargo, lo disfrutas, porque todo ese camino da igual las veces que lo leas siempre te mantiene con ganas de más. También me ha gustado que la autora haya dejado mensajes muy relevantes que ha tratado con todo el mimo y que al final son sucesos que pueden afectar a más de una persona emocionalmente.

Los personajes me han gustado mucho y la química ha sido una auténtica pasada. Han habido momentos donde me sentía ellos por lo intenso que sentían todo y me ha faltado el aliento en algunos de los comentarios que se dedicaban al otro o en la forma que se miraban con tantísima intensidad. Tienen una evolución muy realista y eso me ha tenido con un sentimiento de orgullo muy grande hacia ellos. Mi único pero ha sido el romance en algunos puntos, ya que el desarrollo de esta pasa de la nada y eso me ha sacado un poco de la historia.

La pluma de la autora me sigue sorprendiendo por lo mucho que me gusta aunque no tenga algo que me haga destacarla precisamente. Creo que es la amenidad con la que escribe o la forma en que los personajes sienten y transmite sus emociones lo que ayuda a que yo no sea capaz de soltar el libro aunque sus capítulos sean bastante largos.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Adalyn, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que siempre ha movido su vida en torno al club deportivo de su padre, Miami Flames, buscando su aprobación y demostrarle que puede ser necesaria. Sin embargo, las cosas se complican cuando un vídeo viral de ella golpeando a la mascota del equipo hace peligrar la profesionalidad del club y también la popularidad de su padre. Este último decide enviarla a un pueblo perdido quién sabe dónde, hasta que su imagen se limpie y ella demuestre ser profesional con su trabajo, para mejorar las habilidades de un equipo local del lugar. Sin embargo, ese equipo resultan ser niñas de once años con pocas habilidades en el fútbol y para colmo su entrenador no podría ser peor opción al resultar ser su vecino con quien ha tenido un encontronazo nada amigable. Adalyn necesita recuperar su vida, demostrar que puede lograr el objetivo que su padre le ha puesto delante, aunque eso suponga vivir en una choza horrible durante ese tiempo o tener que aguantar a Cameron, su nuevo vecino y el chico con el que debe trabajar en el equipo por ser el entrenador, a todas horas. La verdadera cuestión es: ¿podrá soportarlo hasta el último segundo?

Adalyn es un personaje que a nivel evolución me ha encantado y eso que al principio me costaba conectar con ella y entenderla. Se nota que tenía un gran transfondo detrás, pero no es hasta que lo lees y ves todo lo que guarda por dentro que no entiendes el nivel de lucha que lleva cargando encima para superar los ideales que hay en un mundo como ese al que quiere aspirar. Además que algo que me ha encantado de este libro es que el cambio de aires que Adalyn da le sirve para darse cuenta de algunas cosas que antes no pensaba ni loca. Comprende hasta qué punto ha dejado de verse a sí misma para contentar al resto y cómo las palabras ajenas han hecho mella en su corazón hasta romperlo en varios pedacitos. He empatizado mucho con esos miedos, con las dudas que la invadían y ese pesar de estar cometiendo errores tras otro, porque en lugar de perdonarse a sí misma porque es humana y como tal es inevitable equivocarse, se reprendía por ello como le hicieron creer. Siempre enseñándole que equivocarse era de lo peor y razón para sentir vergüenza de sí misma. Sus sentimientos por Cameron me han resultado de lo más enternecedores y aunque hay mucha química sexual en el libro entre ellos, también hay sentimientos más profundos gracias a la ayuda que ambos se tienden. Aunque sigo pensando lo mismo que antes, el cómo nace ese amor me ha parecido un poco repentino y sin un proceso de por medio que fuese algo más creíble.

Por otro lado tenemos a Cameron, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que fue conocido por ser uno de los exporteros más importantes del fútbol, pero por motivos desconocidos decidió retirarse sin dar explicaciones. Ahora, Cameron vive en una cabaña en un pueblo perdido buscando alejarse de toda esa fama que dejó atrás y empezar de cero como un completo desconocido para el mundo. Hasta el momento le ha salido bien y habría seguido siendo así si no hubiese llegado "ella". Cameron sabe que Adalyn es igual a problemas, que ella pertenece a ese mundo que está intentando dejar atrás como sea y que tenerla a pocos metros como vecina y compartiendo casi el mismo espacio no es buena señal. Además, tendrán que colaborar para entrenar al equipo local y aparcar sus diferencias hasta entonces aunque ninguno de los dos lo desea. Sobre todo cuando la presencia de Adalyn enciende una llama en Cameron que hace tiempo debió apagarse y que debe seguir así por su propia seguridad. ¿Pero cómo cumples tu cometido si el corazón parece obcecado en que suceda lo contrario?

Cameron es un personaje que me ha gustado mucho (aunque de la autora me sigo quedando con Aaron) y siento que tiene una evolución bastante bonita a nivel romántico. No me esperaba que ese personaje huraño que conoces al inicio de la historia, tendría un fondo tan tierno y adorable, si es que ha conseguido tenerme toda la novela con una sonrisa boba en la cara. Su transfondo no me lo esperaba y la verdad que he experimentado su angustia y esa inseguridad constante que le impedía mantenerse en el punto de mira de alguien. Además que son situaciones que sufren muchas personas famosas y que al final hay que concienciar a la gente de que los famosos también son personas y no simples adornos que poder admirar o molestar cuando te dé la gana. Sus sentimientos por Adalyn me han parecido de lo más dulces y estremecedores, aunque al igual que dije antes, me ha costado creerme el momento en que sucede. Simplemente de un segundo a otro pasa de no caerle bien a enamorarse de ella y me ha costado creerme algo así.

En resumen, "Amor en juego" es un libro que me ha sorprendido más de lo que me esperaba tomando en cuenta que contaba con que iba a estar bien pero un poco sin más. Aunque sí que reconozco que iba con ciertas expectativas que se cumplieron, que era que me enganchase como logró hacerlo otro libro de la autora que me gustó mucho. La trama  me ha gustado bastante y si os soy sincera no me esperaba que iba a tratar algunos temas tan serios como los de la protagonista o que los transfondos que guardaban serían tan grandes. Me ha encantado ir descubriendo cómo la historia evolucionada, ya que aunque sabes desde el inicio cómo va a terminar todo, eso no hace que lo disfrutes menos, sino todo lo contrario. Los personajes me han gustado bastante, de hecho la química entre ellos me ha tenido sin respiración en varios momentos por cómo interactuaban o la manera en que se veían y decían las cosas, con una profundidad que cortaba el aliento. Mi problema ha sido con el romance y es que no me ha parecido del todo real la forma en que sucede. Siento que a diferencia de otros libros, aquí no ha existido ese proceso o desarrollo central y han pasado de odiarse a muerte a de la nada enamorarse y me ha costado creérmelo. La pluma de la autora me gustó en otro libro suyo que leí y aquí ha vuelto a pasarme. No tiene nada que destaque para mí, pero logra resultarme tan ameno y entretenido que el libro me acaba volando de las manos aunque los capítulos sean bastante largos. Además que la forma en que los personajes sienten o cómo se miran o van experimentando cosas por el otro me encanta cómo lo desarrolla de tal forma que te hace sentirlo a ti también.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!