Ángel de sangre #1

Marisa M. R./ Editorial Caligrama/ 442 páginas/ Ángel de sangre #1/ Tapa blanda/ Comprar aquí 

Laius es un joven vampiro criado entre las sombras por un inmortal poco dado a la conversación, pero muy recto en cuanto a las normas que rigen su mundo. Las ansias por descubrir sus orígenes harán que se vea envuelto en medio de su propia moralidad, traiciones, miedos y descubrimientos insospechados. Todo ello mientras una inminente guerra parece estar a punto de estallar y con ella la posibilidad de acabar con toda su especie; aunque ese hecho no es lo único que le preocupa. Hay una joven humana que está empezando a hacerle cuestionarse toda su existencia y no sabe hasta qué punto puede confiar en ella. Sus alocados y recientes amigos le ayudarán a enfrentarse a sí mismo y serán un pilar fundamental para poder superar lo que está a punto de ocurrir.

 

¡Buenas mis queridas estrellas! Finalmente puedo traer otra de las obras de Marisa que tenía conmigo desde hace un tiempo. Si os soy sincera, era uno de sus libros que mayor respeto me generaba por el tema que trata. Los vampiros son un tema complicado para mí, ya que me han decepcionado tantas historias que han hecho de ellos, que ya no sabía que esperarme. Sin embargo, ha sido una historia que, como primera parte, ha conseguido convencerme.

“Ángel de sangre” nos cuenta la historia de Laius, un joven vampiro que fue criado y acogido por Zen, un vampiro superior y poco dado a la amabilidad, después de que sus padres se quitasen la vida a sangre, acto que lo llevó a odiar a los humanos. Él es incapaz de expresar sus emociones, de sentir algo como el amor o la dicha debido a la falta que ha tenido de todo eso. Sin embargo, todo eso empezará a cambiar con la llegada de Noël, una chica que va a enseñarle lo que es sentir con el corazón y por la que sentirá una fascinación confusa. En el trayecto por entender todo eso, una guerra se va cociendo en la oscuridad y Laius deberá enfrentar y superar todo lo que lleva tantos años guardando.

Este es un libro que a pesar de la temática ME HA GUSTADO. Es de las poquitas novelas del género que ha conseguido intrigarme lo suficiente para querer saber más del mundo que ha creado la autora. Sigo sin ser demasiado fanática de los vampiros que tanto nos han acostumbrado las historias, pero esto ya es a nivel personal. El protagonista que nos guía en la historia es de los pocos vampiros que va evolucionando de manera positiva a mi vista y aunque me ha costado empatizar con él, al final lo he conseguido. La trama tarda mucho en ponerse interesante, no deja de ser una primera parte introductoria que nos está metiendo en un mundo lleno de criaturas y una guerra a punto de explotar, y no es hasta un poco más de la mitad de libro que empecé a engancharme a los acontecimientos. Un punto que igual me ha fallado más ha sido que en ocasiones me faltaba algo de credibilidad en los personajes, como diálogos que iban algo forzados y le quitaban algo de realismo a la historia, o que había conflictos un tanto inmaduros que bien se podían haber resuelto hablándolo como personas civilizadas. A pesar de esos pequeños detallitos y de que el inicio es algo denso y confuso, la historia va mejorando entre capítulo y capítulo. La autora tiene una forma de envolverlo todo con un toque mágico que te engancha sin que te des apenas cuenta y es algo que he notado ya en otro libro suyo.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. Por un lado tenemos a Laius, nuestro protagonista masculino. Él es un vampiro que ha tenido un pasado muy difícil. Después de que sus padres acabasen con sus vidas, dio inicio a su odio insano hacia los humanos. Los consideraba seres débiles que se dejaban guiar por sus sentimientos y era incapaz de entenderlo debido a su falta de emociones. Fue criado por Zen, un vampiro que le inculcó todos esos pensamientos y le hizo creer que sentir era malo, lo que lo llevó a no sentir nada para no ser débil como sus padres lo fueron. Laius es de los pocos vampiros que no tiene sensibilidad a la luz, lo que le permite salir al exterior sin problema alguno, por ser mitad humano. Un día que está aprendiendo a cazar con Zen, aparece una presa a la que está a punto de hincarle el diente, cuando Zen lo despista y la pierde de vista. Dicha acción solo sería el comienzo de todo lo que le quedaba por delante. Y es que esa chica es Noël, una chica huérfana a la que volverá a ver un día en el mundo humano. Con ella empezará a tener una conexión confusa a la que es incapaz de ponerle nombre y será una de las claves que le han dudar de todo lo que hasta ahora creía correcto. Laius es un personaje que a pesar de ser vampiro y no mostrar sus emociones al exterior, me ha transmitido más que muchos otros. Quizá el que pudiese ver sus pensamientos sobre todo y que me hicieran entender su temor hacia muchas cosas, ha conseguido que congeniase con él lo que nunca hice por ninguno más. Y es que es un libro en tercera persona que te permite entender los pensamientos y sentimientos de todos, algo que en otros libros no es así por estar en primera persona desde el punto de vista de la protagonista. Para mí ha sido un personaje lleno de miedos que le cuesta sacar a la luz, lleno de dudas y mucha incertidumbre al no comprender lo que realmente ocurrió. Su vida está llena de secretos y Noël será de las pocas personas que no parecen ocultarle nada, será ese pequeño rayo de luz que le brinde la oportunidad de comprender aquello que tanto juzgaba sin entender. Ha sido unos detalles que me han resultado demasiado tiernos y aunque me esperaba el desarrollo de sentimientos de otra manera, no por ello me ha gustado menos. Al final Laius no dejaba de ser una persona que anhelaba ser querida y comprender aquellos que todos parecían sentir a su alrededor salvo él. Hace que congenies con sus emociones y con ese pequeño deseo que nace de su interior. Por otro lado tenemos a Noël, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que se salvó de milagro de Laius aunque ella misma no lo reconozca ni recuerde tal suceso. Cuando conoce al joven en la biblioteca, ambos conectan sin darse cuenta y es que Noël es incapaz de mirarle a los ojos sin sentir que estos invaden su alma por completo. A pesar de su desconfianza inicial, ella irá acercándose al vampiro para ir conociendo los secretos que parecen ocultarse en el fondo de su alma. Noël ha sido un personaje interesante, aunque creo que no se ha ahondado en ella tanto como me hubiese gustado. Quizá por eso el nacimiento de los sentimientos me resultó poco creíble. A veces la sentía como un personaje secundario a la que le aportaban poco protagonismo salvo para las escenas con Laius y es un detalle que no terminó de convencerme. A pesar de ello, ha sido un personaje curioso que tenía cierto potencial por momentos que me han gustado, sobre todo al pensar que es el principal motivo de que Laius vuelva a sentir y vuelva a vivir.

En resumen, “Ángel de sangre” es una novela que para ser la primera parte de una trilogía promete mucho. Sí es cierto que es un inicio muy introductorio y que las primeras páginas son bastante liosas, pero creo que era necesario para comprender bien todo lo que va a ser relevante en los próximos dos libros. Los personajes están muy bien hilados y es que creo que es gracias al gran acierto de la autora al describirlo todo en tercera persona, pues da pie a que podamos conocer bien los pensamientos de todos ellos. Ha habido algunos momentos un tanto fríos y forzados en los diálogos que no me han terminado de convencer y me ha costado internarme bien en la historia por la densidad que hay en el inicio, pero a pesar de todo eso es una primera parte que promete muy bien. Es de los pocos libros temática vampiro que me alegra poder decir que me ha atraído lo suficiente para querer seguir leyendo.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela con vampiros y otros seres sobrenaturales? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!