María Martínez/ Editorial Crossbooks/ 472 páginas/ Cuando no queden más estrellas que contar/ Tapa blanda/ Comprar aquí
Desde muy pequeña, Maya se ha sacrificado en cuerpo y alma por el ballet. Trabaja como solista en la Compañía Nacional de Danza y los ballets más prestigiosos han puesto sus ojos en ella. Sin embargo, un grave accidente acaba con su futuro prometedor. El único mundo que Maya conoce se ha derrumbado. Su abuela, que ha guiado cada uno de sus pasos, la culpa por lo sucedido. La ausencia de su madre pesa más que nunca. Y un hallazgo fortuito abrirá una profunda herida. Un viaje inesperado, una chica incompleta y una verdad escondida en una caja de música. A veces, dejar que suceda es todo lo que necesitas.
¡Buenas mis queridas estrellas! Luego de la maratón que he tenido con María Martínez y que sus libros me hubiesen removido en mayor o menor medida, era hora de darle la oportunidad a su última novedad que me llamaba mucho la atención. Sin embargo, me he llevado una sorpresa bastante decepcionante.
"Cuando no queden más estrellas que contar" nos cuenta la historia de Maya, una chica que sacrifica su vida entera al ballet por deseo de su abuela y que cuando tiene un accidente que le impide volver a bailar, su mundo da un giro tremendo que desestabiliza toda su vida. Sin embargo, no todo está perdido cuando un secreto que creía imposible sale a la luz y Maya tendrá que hacer un viaje en busca de la verdad a todas las preguntas que lleva formulándose toda su vida.
Este es un libro que se ha convertido en una de mis decepciones de María Martínez. Si os soy sincera cuando vi el libro de primeras me esperaba una historia que iba a retorcerme el corazón como lo hizo otra de sus obras (la cual es una de mis favoritas), pero al contrario de lo esperado ha terminado siendo demasiado simple y básico para mi gusto. La trama se mueve sin ritmo alguno, pasan cosas y aunque sabes que son duras apenas te hacen sentir algo de dolor o tristeza por ello, de hecho llegaba a gustarme más los momentos del mejor amigo de la protagonista con su propio amorío que la de esta última, y eso ya me hacía ver que algo no me estaba convenciendo. El mensaje lo considero necesario, pero aquí lo han reflejado muy por encima, sin ahondar en todos los sucesos importantes que ha vivido el personaje y resolviéndolo en las últimas cincuenta páginas como si nada. El final se me ha hecho insufrible, creo que he visto finales abiertos o que te dejan con una sensación un tanto agridulce, pero con este libro ha logrado enfadarme a un nivel muy elevado, porque me ha parecido innecesario y muy alocado todo. El romance no tiene ni pies ni cabeza, de hecho no aporta nada a la trama porque literal que el protagonista tiene menos importancia para la trama al punto que ni siquiera te cuentan bien sus propios problemas personales haciéndolo quedar como el malo cuando la protagonista también tenía lo suyo. Lo único que me ha salvado el libro han sido algunas pequeñas escenas al inicio del amor propio que me han gustado más y la pluma de la autora que sigue siendo igual de especial que sus anteriores libros.
Ahora os hablaré un poco de los personajes principales. Por un lado tenemos a Maya, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que siempre ha vivido en pos del ballet a causa de su abuela, quien le ha exigido vivir bajo las patrones y obligaciones de ese baile. A pesar de su pasión por bailar, es incapaz de vivir su vida en paz y armonía ni siquiera con su pareja. Por ello cuando su mundo da un giro con una noticia inesperada, Maya tendrá que elegir un camino que puede romperla en pedazos o devolverle la felicidad que le han arrebatado. Maya es un personaje que de primeras consiguió hacerme empatizar con ella por esas cadenas que tenía encima. Nunca es fácil cumplir las expectativas de todo el mundo y menos vivir con las exigencias de hacerlo todo a la perfección y sin la posibilidad de cometer errores. Sin embargo, este personaje siento que ha ido decayendo junto con la historia, en lugar de ver el mensaje que quieren transmitirnos sobre el amor propio, he terminado encontrándome con unas escenas apresuradas de ella donde hace todo a correr y sin pensar. Tomando decisiones, algunas muy absurdas, otras surrealistas debido a las prisas que se tomaron con las escenas y finalmente dándole un desenlace que no me ha gustado nada. Es un personaje del que tenía muchas expectativas y ha terminado por dejarme una sensación muy agridulce encima. Por otro lado tenemos a Lucas, nuestro protagonista masculino. De él no puedo hablar mucho porque no tenemos punto de vista de él, pero puedo comentaros que es un chico al que Maya conoce en el lugar donde decide viajar para encontrar respuestas. Él es un chico con una personalidad atrayente que lentamente irá entrando en su corazón sin pretenderlo. Este personaje me ha fallado muchísimo y principalmente es porque siento que no lo he conocido NADA. Dejan toda su historia abierta y sin explicaciones, no dan detalles de qué ha sucedido con él porque incluso su historia podría haber representado el amor propio en otros conceptos. Me ha dejado muy fría y lo mismo con el tipo de relación que estaban teniendo Maya y él, una que no he podido ver con buenos ojos por la toxicidad que llegaba a ver por momentos entre los dos.
En resumen, "Cuando no queden más estrellas que contar" es un libro que me ha decepcionado bastante y que se ha vuelto una de mis peores libros de María Martínez. La trama me ha parecido muy simple y por momentos algo aburrida porque la emoción del libro se hace plana cada dos por tres, al igual que las interacciones entre los personajes que no consiguen removerte nada. Los personajes se hacen tediosos y toman decisiones abruptas y sin un motivo aparente, haciendo que las escenas queden más surrealistas y raras si cabe. El romance no me ha aportado nada y soy de las pocas que dicen que no era necesario para tratar el mensaje del amor propio. Lo único que me ha gustado ha sido la narrativa de María que ha captado en ella los mensajes clave del amor propio al igual que algunas escenas de la protagonista con sus pensamientos sobre sí misma. El final se me ha hecho desastroso y no me ha hecho sentir nada de nada.
¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.
¡Nos vemos en la próxima reseña!
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