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viernes, 27 de septiembre de 2024

La química del amor

Ali Hazelwood/ Editorial Contraluz/ 480 páginas/ La química del amor/ Tapa blanda/ Comprar aquí




Bee Königswasser se rige siempre por un código muy sencillo: ¿qué haría Marie Curie? Si la NASA le ofreciera liderar un proyecto de neuroingeniería, un sueño hecho realidad después de pasarse años malviviendo con las migajas del mundo académico, Marie aceptaría sin dudarlo. Obvio. Pero la madre de la física moderna nunca tuvo que codirigir ningún proyecto con Levi Ward. A ver, Levi no está nada mal: es alto, moreno y tiene una mirada de lo más penetrante. Pero Levi dejó muy claros sus sentimientos por Bee en la universidad: es mejor que dos enemigos trabajen cada uno en su propia galaxia muy muy lejana. De pronto, Bee se encuentra con que su material ha desaparecido, el personal pasa de ella y su maltrecha carrera profesional pende de un hilo. Puede que su lóbulo occipital esté jugándole una mala pasada, pero juraría que Levi empieza a convertirse en su aliado, apoyando sus decisiones, secundando sus ideas... devorándola con esa mirada suya. Y las diferentes posibilidades traen a sus neuronas de cabeza. Sin embargo, cuando llega el momento de jugársela y arriesgar el corazón, solo hay una pregunta que importe: ¿Qué hará Bee Königswasser?



¡Buenas mis queridas estrellas! Nunca pensé que al hacer esta reseña, llegaría con una opinión TAN positiva de este libro después de la decepción catastrófica que me llevé con "La hipótesis del amor" PERO, esto hace que reafirma por qué adoro retomar historias o darle oportunidades a las autoras que no me gustaron la primera vez, porque siempre puede haber excepciones, como ha sido el caso de este libro que me ha maravillado.

"La química del amor" nos cuenta la historia de Bee, quien siempre se ha guiado por la pregunta de qué haría Marie Curie en su lugar. Y es que cuando la NASA le ofrece trabajar para ellos como su neuroingeniera, para Bee es un sueño hecho realidad, algo que aceptaría de cabeza al igual que lo haría Curie. Pero hay algo que se lo impide... Más bien, ALGUIEN con mayúsculas: Levi Ward, su archienemigo desde la escuela. Lo único que Bee ha sabido siempre es que Levi la odia por un motivo que no puede comprender y que siempre la rehuyó como si fuera un bicho raro. Por eso la sola idea de trabajar juntos no parece del todo viable y posible. Pero entonces, cuando el mundo parece ir totalmente en su contra, Levi empieza a ayudarla como nunca pensó que lo haría, a apoyarla en los momentos menos inesperados y a observarla con tanta intensidad que su cerebro no es capaz de sobrellevar todas las dudas que eso la despierta. Porque es ahí donde ella deberá preguntarse sinceramente: ¿qué es lo que haría entonces, no Marie Curie, sino Bee Königswasser?

Este es un libro que si os soy sincera no estaba segura de si llegaría a leer, pues después de la decepción grande que me llevé con "La hipótesis del amor" tenía serias dudas de si darle alguna oportunidad más a la autora. Y sí, puede que este no haya sido el libro de mi vida de romance, pero sí que me ha sorprendido y me ha volado de las manos por lo mucho que lo he disfrutado a diferencia del primero que leí de ella.

La trama me ha gustado, aunque en general no tiene algo que la haga destacar por ser diferente o innovador. PERO ha sido un pellizco al corazón que me ha tenido con la sonrisa boba en cada página. Me ha encantado la fluidez en la que se desarrollaba todo, al igual que me ha sorprendido que, en ningún momento, se haga pesado seguir la evolución de los acontecimientos y sobre todo los mensajes potentes que tiene. Algo que quizá me ha sobrado un poco, ha sido un drama al final que quizá quedó un poco telenovelesco, pero dejando eso a un lado ha sido una auténtica aventura que ya estoy echando de menos.

Los personajes me han fascinado y, sí, la mayor puntuación se la lleva gracias a ellos por la magia que le han dado a todo el libro. Todo lo que no lograron la otra pareja, lo consiguieron estos dos conmigo. Me han tenido sonriendo, suspirando, riendo, chillando y muriendo de amor con cada interacción que tenían. Además que me ha resultado todo más natural entre ellos, más fluido y hasta tierno por toda la historia que cargaban a sus espaldas. El romance ha sido una vorágine de emociones que me han tenido el corazón calentito y me ha enamorado de formas que no puedo llegar a explicar.

La pluma de la autora me ha gustado mucho más en este libro. No sabría deciros si es a causa de la protagonista o si la autora amenizó un poco la forma en que explicaba las cosas, pero se me ha hecho mucho más ágil y entretenido. Además que todos los tecnicismos científicos los he entendido mucho más en este libro que en el otro y eso ha ayudado a que no me perdiera cada dos segundos en la historia.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Bee, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que durante toda su vida ha vivido con un solo lema y es preguntarse en cada situación donde tuviera que elegir algo, qué es lo que haría Marie Curie en su lugar.  Debido a que es la mujer que más ha admirado desde pequeña, incluso se ha abierto un Twitter donde con el alias "@quéharíaMarie" hace preguntas existenciales donde todas las personas que se sientan identificadas pueden liberar sus propias respuestas o ayudarse mutuamente. Y también será una cuenta en la que podrá apoyarse mucho desde ahora pues la vida le está dando un sueño cumplido y es que la NASA le está dando la oportunidad de trabajar en su sector soñado, la neuroingeniería. Podría estar dando mil saltos en esos momentos por ello, pero saber que tendrá que compartir trabajo con su archienemigo desde la escuela, Levi Ward, le impide que ese suceso pueda ocurrir. Porque ya no solo tiene que sufrir consecuencias como que su material tarde en llegar, que tenga que aguantar los comentarios de un equipo con muchos prejuicios y que su carrera profesional, el sueño por el que lleva luchando años, pende de un hilo si no logra sacar todo eso adelante, sino que encima sin entender bien por qué Levi empieza a ser más amable con ella. La ayuda sin pedirle nada, la apoya en los momentos más cruciales y la mira como jamás pensó que alguien podía ser observada antes. Las dudas son tantas, que lo único que Bee puede hacer por primera vez en su vida es preguntarse, no lo que haría Marie Curie en su lugar, sino lo que hará Bee Königswasser ahora que las cartas están echadas. ¿Será capaz de plantar cara a lo que le pide su corazón?

Bee es un personaje que me ha alucinado como protagonista y os prometo que el cariño que le he cogido desde el primer capítulo ha sido bastante considerable. Me ha dado una alegría enorme poder conectar con ella, ya que con el libro de Olive no pude hacerlo, y además me ha hecho reír en más de una ocasión y conectar con la forma en que se desarrollaba su propia historia. Creo que tiene una evolución mucho más constante, que la he sentido hasta más cercana y humana, algo que me ha sorprendido para bien y me ha tenido con ganas constantemente de ver más de su evolución. Además que algo que me encanta es que aquí se le da visibilidad a muchos mensajes necesarios y que en ningún momento se te hace pesado o invasivo, pues tiene el equilibrio perfecto para hacer la historia interesante y entretenida al mismo tiempo. Algo que quizá me ha fallado un poco, y esto ya es a nivel personal, es que quizá el drama final fue un poquito exagerado de más, ya que me esperaba algo intenso, pero tampoco TAAAN telenovelesco. Aun así, descontando ese pequeñito detalle, me ha flipado lo bien estructurada que está Bee y lo bien llevado que están sus sentimientos y todo lo que le cuesta avanzar después de las situaciones que ha vivido en su pasado y que le impide crear lazos afectivos. Me he sentido muy identificada con ella y por eso he podido disfrutarlo más si cabe.

Por otro lado tenemos a Levi, nuestro protagonista masculino. De él no os puedo hablar demasiado ya que lo que os cuente puede ser considerado spoiler porque no tiene punto de vista. Así que os contaré un poco sobre él y mi opinión general del personaje.

Levi es un personaje que me ha tenido con la sonrisa en la cara desde la primera aparición hasta la última y, sí, puedo afirmar que ahora sí me he enamorado de un personaje masculino de esta autora. Es que lo ha tenido todo, cada pequeño detalle que me encanta de un personaje se lo han dado a él. Y también, algo que me ha encantado es el simple detalle de que ha tenido lo que Adam no tuvo para mí en "La hipótesis del amor" y es una evolución, algo que iba más allá del simple romance con Bee. Había más transfondo con él y eso lo humaniza, no lo tienen solo en la historia como florero que solo está ahí para crear escenas románticas con la protagonista y poco más, sino que ha tenido su crecimiento y bastante notorio diría yo. Además que es super bueno y en todo momento se ve la dulzura que Levi tiene dentro, la clase de persona que es y como es evidente que todo lo que ve Bee es un simple malentendido. Sí, es una mecánica que tuvo también el otro libro, pero a diferencia de ese, siento que aquí le ha salido bien y ha quedado perfecto. Básicamente, Levi se ha convertido en un nuevo crush de mi vida y que, vamos, todos queremos a una persona así que nos haga sentir en las malditas estrellas a cada segundo del día. Para mí, el mejor personaje masculino de la autora hasta ahora.

En resumen, "La química del amor" es un libro que me ha sorprendido gratamente, porque después del golpe que me pegué con "La hipótesis del amor" me esperaba un camino similar con este. Pero no ha sido el caso y os prometo que eso ha hecho que me sienta muy feliz y que me repita al decir que: Dadle siempre segundas oportunidades a las cosas, porque a veces no sabemos si quizá lo siguiente que leamos de una saga, una autora o lo que sea, pueda llegar a sorprendernos. La trama me ha gustado, aunque en general no es el punto fuerte de la historia si no contamos los mensajes grandes que tiene la trama. A diferencia del otro, este ha avanzado con fluidez y cuando me he querido dar cuenta ya casi me había devorado gran parte del libro. Lo que ha sido un pequeño punto que no me haya gustado ha sido el drama final que ha pasado de una forma que ha sido un poco telenovelesca (no lo romántico, sino otra cosa) y es que no me ha parecido del todo creíble. Los personajes me han encantado y es lo más potente del libro. Los diálogos, la manera en que se van conociendo, cómo pasan de un punto a otro y la manera en que se tratan incluso cuando al inicio se llevan a matar es una auténtica gozada. Yo me he vivido la relación de ellos como si fuera la mía, por no hablar de que todo lo que ocurre entre ellos me ha parecido muy humano y realista, sobre todo a nivel transfondo. Incluso Levi tiene evolución y no se limita a ser el añadido que está para decirle cosas bonitas a la protagonista y hacer escenas románticas con ella, sino que hay mucho más en su personaje. El romance ha sido una maravilla y me ha tenido con una sonrisa idiota en la cara todo el maldito libro SIN DEJAR DE SUSPIRAR. La pluma de la autora me ha sorprendido, porque en su primer libro me costó engancharme con ella, de hecho su forma de narrar se me hacía algo pesada y densa. Por eso cuando empecé este libro me esperaba más de lo mismo, pero no ha sido el caso. Aunque te documenta mucho de la ciencia, aquí ha sido más soportable y hasta me ha gustado y ha sido fácil de entender. Por no hablar de que a diferencia del primero, aquí he sentido que le daban más peso al romance y no tanto a la documentación, lo que te permitía fluir más con los personajes.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!








 



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