Sucedió un verano [Bellinger Sisters #1]

Tessa Bailey/ Editorial Titania/ 384 páginas/ Sucedió un verano [Bellinger Sisters #1]/ Tapa blanda/ Comprar aquí

Piper Bellinger es una influyente del mundo de la moda y su reputación de alocada hace que la persigan los paparazzi. Tras acabar en el calabozo por organizar una fiesta ilegal con demasiado champán en la azotea de un hotel, su padrastro decide que esa es la gota que colma el vaso. De modo que la deja sin dinero y para que aprenda lo que es la responsabilidad, la envía al estado de Washington, donde acabará regentando el bar de su difunto padre junto con su hermana. Piper no lleva ni cinco minutos en Westport cuando conoce a Brendan, un corpulento y barbudo capitán de barco, que cree que no durará ni una semana lejos de Beverly Hills. ¿Qué pasa si es una negada con las matemáticas y si la idea de dormir en un piso cochambroso con literas le da escalofríos? Tan malo no puede ser, ¿verdad? Está decidida a demostrarle a su padrastro, y también a ese capitán de barco tan guapo y gruñón, que es más que una cara bonita. El problema es que está en un pueblo pequeño y se cruza con Brendan cada dos por tres. La extrovertida reina de las fiestas y el pescador gruñón son polos opuestos, pero la química que surge entre ellos es innegable. Piper no quiere distracciones, ni mucho menos sentir algo por un hombre que se pasa semanas faenando en el mar. Sin embargo, a medida que reconecta con su pasado y empieza a sentirse como en casa en Westport, empieza a plantearse si la fría y glamurosa vida que ha llevado hasta el momento es la que desea de verdad. Aunque siente la llamada de Los Ángeles, tal vez Brendan y ese pueblo lleno de recuerdos hayan conquistado su corazón.

¡Buenas mis queridas estrellas! La verdad es que después de acabarme "Unas vacaciones de muerte" de la misma autora, me entraron muchas ganas de leer algo más suyo y descubrir qué más historias suyas podrían gustarme o emocionarme. Y es así como caí en esta bilogía que recuerdo que gustó mucho en su momento de salida. La verdad es que me ha entretenido y aunque no ha sido el libro de mi vida, me ha convencido lo suficiente para tener mi aprobado.

"Sucedió un verano" nos cuenta la historia de Piper, una influencer que ha tenido todo al alcance de su mano y jamás le ha faltado de nada. Quizá por eso nunca se ha parado a pensar en las consecuencias de sus propios actos hasta que no comete un enorme error que pone en riesgo uno de los negocios de su padrastro. Ahora él ha decidido castigarla con un cambio radical como compensación para disculparse y será marcharse durante unos meses sin dinero ni ninguna comodidad Westport, donde tendrá que valerse sola. ¿El problema? Que es el lugar donde creció su padre fallecido durante años y tendrá que regentar su antiguo bar y demostrar su valía pese a las dificultades que tiene en general para responsabilizarse de algo que esté fuera de sus redes sociales. Especialmente cuando el lugar está descuidado y su nuevo piso es tan horrible que dan ganas de salir corriendo. Pero no lo hace y la principal razón es Brendan, el capitán de un barco, que cree que ella no durará ni cinco minutos en ese lugar. Ella quiere demostrar que puede hacerlo, aunque vivir en una situación así la ponga de los nervios. Y es que, lo que empieza siendo un trayecto horrible, poco a poco irá demostrándole a Piper la importancia de pararse a ver el mundo lejos de una pantalla, y que a veces aparece el amor donde menos lo esperas. ¿Pero quién le diría que ese lugar se hallaría en Brendan, su polo opuesto por completo?

Este es un libro que forma parte de la bilogía "Bellinger Sisters" como el primer libro y la verdad es que me ha entretenido y se me ha hecho muy ameno de leer. Creo que esta autora tiene un estilo de escritura que se hace super rápido de leer y no se hace cargante en ningún momento a pesar de que la historia pueda ser más o menos cliché. Y aunque le he visto algún que otro fallo, me ha venido perfecto un libro así para desconectar después del trabajo y no tener que exprimirme demasiado la cabeza.

La trama me ha gustado, pero es que en general está hecho para que eso pase debido a los clichés que carga. Sí que es verdad que no es de los mejores que he leído con esa temática, ya que pienso que por momentos la historia iba demasiado deprisa y todo lo que ocurría era un poco precipitado, pero cuando te olvidas de eso lo acabas disfrutando más. Algo con lo que sí he tenido problemas es con las escenas sexuales, se me hacían DEMASIADO sobreactuadas, literal que llegaba un punto que parecía el guión de una película porno por las bastadas que soltaban en determinados momentos.

Los personajes me han gustado, pero porque el cliché de polos opuestos, siendo ella una influencer y él un gruñón cascarrabias y pescador capitán, es uno que disfruto bastante en general. Sí que es cierto que los momentos de ambos cuando no iban a lo sexual, me parecía de lo más tierno, especialmente por él que no dejaba de beber los vientos de ella y hacer lo que fuera por verla feliz. El conflicto ha estado bien, pero quizá me ha faltado un poquito más de profundidad en algunas cosas que sentían. El romance me ha gustado, quizá algo precipitado por momentos, pero fuera de eso ambos me han parecido de lo más cuqui.

La pluma de la autora me sigue gustando bastante, especialmente porque se hace muy ameno de leer y no te sobrecarga con información constantemente. Sí que es verdad que me ha chocado un poco que el libro se escribiese en tercera persona y tuviera los dos puntos de vista, ya que me suele gustar que los libros de ese estilo tenga la primera persona con todos los personajes, ya que se me hace más cercano. Aun así es un detalle insignificante y al final me he terminado acostumbrando sin problemas, haciendo que disfrute el libro sin más percances.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Piper, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que durante toda su vida solo ha pensado en su afición como influencer y en atraer las miradas de los demás sobre ella. Le encanta que la mimen, que la alaben y que la adoren, por eso hace lo que sea necesario por ser recordada, por llamar la atención de todos y dejarlos sin aliento. Por eso cuando su novio la deja, Piper decide olvidar las penas montando una locura de fiesta que acaba salpicando a la empresa de su padrastro. Esa situación termina con la paciencia de este y toma una decisión radical para la vida de Piper: mandarla lejos de Beverly Hills, a Westport, y dejar que sobreviva ella sola sin dinero ni ninguna de las comodidades que la han acompañado toda su vida. Lo único que tiene consigo es a su hermana Hannah, que ha decidido ir con ella para que no tenga que enfrentar la situación sola. Todo estaría bien si hubiera quedado ahí, pero es que el lugar al que llega y donde debe vivir unos meses es horrible. Perfecta para protagonizar una película de terror. Y el bar que debe regentar y que pertenece a su difunto padre tampoco es mucho mejor. Piper está a dos segundos de huir y suplicarle a su padrastro de volver, hasta que aparece Brendan, un capitán de barco cascarrabias que asegura que ella no aguantará nada en ese lugar, y el orgullo de Piper la impulsa a soportarlo todo lo que pueda. Piensa demostrarle a ese gruñón que puede aguantar aunque todo lo de ese lugar la tenga con las alarmas puestas constantemente. Y en medio de esa disputa con Brendan, Piper empezará a conocer el encanto que reside en ese lugar, e incluso comprender mejor a ese complejo hombre que detrás de su fachada gruñona, se esconde una persona llena de pasión y calidez que le afecta de una forma que jamás le había sucedido antes... ¿Y si ese lugar lleno de recuerdos son las respuestas que necesita para, no solo conocer a su padre, sino también para encontrarse a sí misma?

Piper es un personaje que me ha costado por momentos conectar con ella, pero porque somos polos opuestos en todos los sentidos. Al final trataba de empatizar con ella en todo lo posible, pero al tener maneras tan diferentes de ver y sentir la vida, me costaba comprender la razón de que su vida se parase por motivos como no tener suficientes seguidores o audiencia. Aun así, creo sinceramente que según avanza el libro, me ha ido gustando más porque he comprendido mejor lo que se escondía detrás de esa fachada algo superficial. Me dejó ver una persona que buscaba todo aquello porque deseaba sentirse querida, importante y que era capaz de hacer las cosas bien aunque muchos le recalcasen que no lo era. Al final cuando toda tu vida se la pasan criticando cada paso que das o viéndote por encima del hombro, es normal que cargues con un miedo que se desarrolla en torno a que seas olvidada, a que dejen de tenerte en cuenta y ya no seas suficiente para nadie. Ver el crecimiento que se va formando en torno a ese miedo, a su evolución como persona y a que eso le permitiera apreciar las cosas desde otro punto de vista, me ha hecho empatizar con ella y cogerle cierto cariño. Además que los sentimientos que tiene hacia Brendan y como estos van tomando forma me tenían chillando en cada página, porque de verdad que eran una auténtica cucada (dejando a un lado lo sexual).

Por otro lado tenemos a Brendan, nuestro protagonista masculino. Él es un chico que creció bajo la clara convicción de que su vida se movía en pos de una rutina que se negaba a cambiar. Le gustaba saber que llevaba el control de las cosas y que nada desajustase su formal estilo de vida. Por eso cuando perdió a su mujer y no pudo estar a su lado debido a esas circunstancias, Brendan se ha movido en pos de tratar de pagar su grandísimo error. No consideraba que eso fuera a cambiar, pero tampoco contaba con que Piper aparecería en aquel pueblo perdido al que nunca iría alguien como ella. Cuando la vio por primera vez, Brendan pensó que no duraría ni un día en aquel lugar viendo su forma de hablar, de vestir y de moverse, porque desentonaba en aquel lugar tan tosco e incluso algo asalvajado. Pero cuando ella decidió enfrentarle y demostrarle que estaba equivocado, algo en su interior empezó a cambiar de una forma que jamás había sentido. Piper era su opuesto, pero algo en ella lo atraía como un imán, hacía que cada segundo que pasaba a su lado, que empezaba a conocerla, algo hiciera click en su corazón y le arrancase el aliento. Solo había un problema: Piper no quiere nada serio, menos aún cuando su estadía allí es temporal y volverá a Bervely Hills para seguir con su estilo de vida como influencer. Y aunque una parte de Brendan siente que debería dejarla tomar el camino que desee, no puede evitar pensar que quizá, solo quizá, Piper necesita encontrar una razón que la haga ver que ese lugar es perfecto para quedarse. ¿Conseguirá traspasar el corazón de esa cabezota chica y demostrarle que lo que él siente va más allá de algo meramente pasajero?

Brendan es un personaje que sabía que iba a ser difícil que no me gustase, porque el cliché de chico gruñón me suele gustar bastante. Aunque sí que es cierto que es el menos gruñón de los libros que he leído, ya que ese estado le dura poco cuando empieza a ver a Piper con otros ojos (algo que no tarda demasiado en pasar). A partir de ahí pasé de ver a un oso cascarrabias a un oso tierno que se la pasaba buscando formas de hacer reír a la chica que hacía latir su corazón. Y para qué os voy a mentir, me pasé el libro con una sonrisa boba cada vez que él la miraba o tenía un detalle con ella tan dulce y comprensivo. Incluso comprender que tenía miedo de hacer algo mal, de asustarla o de decepcionarla me conmovía, porque al final él se sentía muy poca cosa al lado de ella, quien parecía brillar con luz propia. Ver sus dudas de que ella quisiera quedarse a su lado, cuando en su hogar la esperaban con mil obsequios que él no podía brindarle me rompía el corazón, porque de verdad se atisbaba el miedo que le atenazaba por perderla a ella, a la mujer que le había ayudado a volver a respirar. Sus sentimientos son un frenesí de emociones que me han tenido de un estado a otro todo el tiempo. Me la he pasado enternecida en todo el libro (menos en lo sexual) porque él no deja de luchar por ella, por demostrarle que lo que hay entre ambos va más allá de algo físico. Que lo que sienten está traspasando cada una de las barreras que se pusieron para no volver a sufrir daños y que quiere volver a intentarlo todo si se trata de ella.

En resumen, "Sucedió un verano" es el primer libro de una bilogía que tenía muchas ganas de leer porque quería volver a leer a la autora y porque oí hablar muy bien de estos dos libros (especialmente del segundo) y me pudo la curiosidad de empezarlo y descubrir qué es lo que me estaba perdiendo todo este tiempo. Y aunque sí que es verdad que la historia no es de estas que te dejen loca por su originalidad, sí que es adictiva como su otra novela que leí y me lo he bebido como siempre. La trama es sencilla, un cliché básico de chica influencer y famosa con un chico que pasa desapercibido y que es un gruñón cascarrabias. Vamos, dos polos opuestos que encima tienen estilos de vida completamente diferentes. Y a pesar de lo típico se vuelve adictivo de leer y te mantiene con las ganas de descubrir qué más momentos van a vivir los personajes antes de llegar al momento clave que los obliga a estar juntos. Algo que sí que no me ha convencido han sido las escenas sexuales, la verdad es que ya con el primer libro de la autora que leí me di cuenta de que tenía una forma peculiar de escribirlo, pero aquí ha sido excesivo. Había momentos donde hasta sentía que los diálogos parecían sacados de una película porno, porque eran algo violentas y sobreactuadas. Los personajes me han gustado, creo que los dos demuestran tener mucha química cuando hablaban o vivían momentos juntos fuera de la cama. Me parecían una auténtica adorabilidad y es que era imposible no ver que los dos sentían miedo y dudas a la hora de arriesgarse, pero que aun así no podían frenar lo que el otro le hacía sentir. Me ha gustado que la interacción que tenían iba cambiando poco a poco, ya que la atracción que sienten es tan inmediata que ver que lo demás iba algo más lento se agradece bastante.  El romance era una cucada, pero porque los personajes se la pasan dando esos pasos minúsculos por los nervios y el no saber qué va a suceder a continuación por desconocer lo que piensa o siente el otro. Así que durante todo el libro he querido abrazarlos y cuidarlos, aunque también zarandearlos cuando se autoboicoteaban ellos solos su propia felicidad. La pluma de la autora me ha gustado mucho, de verdad que sus libros se me hacen tan amenos que no me doy cuenta de lo rápido que avanzo con la historia. Me encanta la facilidad con la que transmite las emociones, la sencillez de su escritura y que a la vez le dé tanta frescura que te puedes leer cien páginas y no darte cuenta del tiempo que llevas pegada a las páginas. Y es que aunque sus historias son predecibles y clichés, logra darle ese toque único que te mantiene con el corazón calentito y enternecido.

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!