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jueves, 12 de junio de 2025

Todos nuestros veranos

Carley Fortune/ Editorial B/ 336 páginas/ Todos nuestros veranos/ Tapa blanda/ Comprar aquí




Persephone Fraser (Percy para los amigos) pasa los veranos en su moderno piso de Toronto, muy lejos del recuerdo de la resplandeciente orilla del lago de su adolescencia.

Sin embargo, una noche recibe una llamada que la lleva de vuelta a Barry's Bay y a Sam Florek. Durante seis veranos de tardes largas en el bosque y noches cálidas en el restaurante de su familia, Sam y Percy fueron inseparables. Y poco a poco, su amistad se fue convirtiendo en algo más profundo antes de desmoronarse por completo.

Cuando Percy regresa al bosque más de una década después, descubre que la química entre ellos sigue intacta. Pero hasta que no se enfrente a las decisiones que tomó, no podrán descubrir si el amor que sienten es mayor que los errores que han cometido.




¡Buenas mis queridas estrellas! Había escuchado maravillas de esta autora y por eso cuando tuve la oportunidad decidí animarme con el libro y descubrir lo que me estaba perdiendo. Sinceramente, el libro es muy tierno hasta gran parte de la historia, pero la recta final ha sido un no rotundo para mí. He decidido darle una nota acorde al porcentaje que me ha gustado, pero sin excederme, pues esa recta final ha conseguido que se salga por completo de la posibilidad de ser uno de mis libros favoritos.

"Todos nuestros veranos" nos cuenta la historia de Persephone, quien vive en Toronto tras haber dejado atrás toda una vida de recuerdos en aquel lago que formó parte de su infancia. Allí conoció a quien fue su mejor amigo, un retazo de su familia, y la persona que más feliz la hizo durante seis veranos inolvidables. Los dos se convirtieron en el hogar del otro, encontraron un refugio donde expresar aquello que amaban y sostenerse cuando lo malo amenazaba con hacerles caer. Pero entonces, todo se rompió de forma inminente y ahora, años después, ninguno de los dos sabe qué hacer o cómo seguir adelante. Por eso cuando Percy reciba una llamada del pasado, sabe que la única opción es volver, aunque hacerlo signifique abrir una puerta que llevaba mucho tiempo cerrada. ¿Qué encontrará al otro lado cuando la abra de par en par? ¿Sam seguirá siendo aquel mismo chico al cual amó con todas sus fuerzas? ¿Y será capaz de perdonar todos los errores que cometió cuando eran unos niños?

Este es un libro que tenía muchísimas ganas de leer desde que salió y es que no dejaba de leer maravillas por todas partes de su historia. Escuchaba a mucha gente decir que era de esos libros que te dejaban con el corazón calentito, que incluso te hacía pensar detenidamente en todo y que cargaba con mucho realismo por lo que cuenta. Y ahora, tras haberlo terminado, no puedo evitar preguntarme: ¿dónde está ese supuesto realismo? Porque de verdad que aunque intento buscarlo, no hay nada del libro que me haga pensar que eso es algo que haría cualquier persona con algo de racionalidad.

La trama me estaba gustando mucho, porque yo con cualquier friends to lovers ya estoy dentro. Pero es que el libro ha ido perdiendo aguas por todas partes. Hasta la mitad es una historia preciosa donde me ha ido sacando más de una sonrisa y que me tenía muy picada para descubrir qué estaba pasando... Hasta que llegas a la recta final y todo se va al traste. De verdad que no entiendo la necesidad de los autores de meter el cliché de la infidelidad, porque os prometo que romantizar eso me parece lo más horrible del mundo. No me ha gustado nada el final y, sinceramente, viendo las razones de la separación, para mí no deberían haber tenido un final feliz.

Los personajes me habían empezado gustando mucho. Sentía que los dos tenían mucha química y me gustaba sus interacciones, la forma en que iban creciendo de la mano y el cariño que se notaba en los dos. Además que las relaciones que tenían con sus familiares o con las personas que les rodeaban le daba mayor dinamismo a la historia en sí. Por eso cuando avanza la historia y vas viendo su evolución final, a mí se me perdió todo por completo. Todo ese realismo que tenían se desvanece por la poca lógica que tenían con sus reacciones a lo ocurrido. Además, el romance pasa de ser una cosa muy tierna a volverse tóxico y hasta dependiente a unos niveles que he sido incapaz de valorar que tengan un final feliz como tal.

La pluma de la autora me ha gustado y por esa parte no tengo ningún tipo de queja al respecto. Creo que tiene un ritmo muy bueno que te mantiene enganchada desde la primera a la última página y por esa parte todo el libro se me ha hecho muy ameno y rápido de leer. No negaré que algo que no me ha convencido mucho es que los capítulos fueran tan exageradamente largos, ya que a veces por falta de tiempo me costaba ponerme con ellos y a veces hasta me veía forzada a dejar alguno a medias. Aunque no me haya convencido la historia, creo que su estilo es bastante bueno y confío en que con otro tipo de historia y trama podría gustarme más.

Ahora os hablaré un poco de los personajes principales.

Por un lado tenemos a Persephone, nuestra protagonista femenina. Ella es una chica que vive en Toronto, acomodada en un piso moderno y tranquilo donde ha conseguido recuperar el control de su vida por completo. Aun así, una parte de ella está algo desconectada de esa realidad, de ese nuevo estilo de vida en el que se mueve y es que aunque quiera negarlo y esconderlo, nunca ha podido borrar del todo los recuerdos de aquellos veranos que vivió en el lago donde encontró todo aquello que la hizo feliz. Allí no solo encontró a su mejor amigo, sino también al amor de su vida y una segunda familia a la que sostenerse cuando el mundo se le venía encima. Pero todo terminó de forma abrupta por culpa de ella, por sus malas decisiones, y ahora tras tantos años sabe que intentar arreglar el error es una estupidez. Pero entonces el destino se mueve y ocurre algo inesperado: recibe una llamada de Charlie que le cuenta que Sue, la madre de él y Sam, ha fallecido y que puede ir al entierro si lo desea. Aunque Percy está aterrada porque sabe que esa situación solo significa que volverá a ver a Sam, también entiende que no tiene otra opción. Es algo inevitable. Por eso emprende un viaje de vuelta a aquel bosque que la vio crecer, donde se encontrará cara a cara con su pasado, aquel que tendrá que decidir si al fin es momento de dejar atrás para cerrar esas heridas que llevan ya demasiado tiempo abiertas. ¿Sam estará dispuesto a escucharla? ¿Y lograrán arreglar dichos errores? ¿O ya es demasiado tarde para perdonar?

Persephone es un personaje que ha sido un completo no para mí. No os mentiré, cuando empecé a leerla me creí que iba a ser de esas protagonistas que te exasperan un poco por no valorarse a sí misma, pero que al final acabaría encontrando su camino hacia el amor propio y a estar bien consigo misma. Y hasta cierto punto es lo que te encuentras, cosa que no me ha disgustado del todo. El problema viene después, a raíz de que se desvele lo que realmente había pasado para que los dos se separasen cuando eran jóvenes y que todo se rompiese entre los dos. Lo que más me duele de esto es que me lo olí al principio, pero luego pensé que sería demasiado fuerte poner una situación así en un libro romántico, ya que no vería la forma de resolver algo así después. ¿Y cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que SÍ ocurre eso y que encima termina siendo incluso peor de lo que creía? Percy es la clase de chica que odio, una victimista de muchísimo cuidado que no sabe mirar más allá de su propio ombligo. Seguramente más de uno venga diciendo que no, que ella sí que se preocupaba por los demás y blablablá. Pero es que da igual qué capítulo te leas, en todos, TODOS, Percy se la pasa compadeciéndose a sí misma porque las cosas le salen mal porque ELLA ha sido la causa de que eso ocurra. Encima me intentan vender que ella es inocente porque: "ay, pobrecita, ¿es que no ves que se arrepintió enseguida de sus acciones y que encima tuvo un ataque de ansiedad?" Vaya, ¡es cierto! ¡Perdonadme por no saber ver que ella realmente es una víctima más! (nótese el sarcasmo). No se merecía a Sam, no se merecía a su mejor amiga, no se merecía a ninguna persona que ha estado con ella y ha tenido que soportar sus estupideces y que solo se haya limitado a mirar sus propios sentimientos pero nunca el de los demás. Entiendo que hay que priorizarse, pero también creo que es importante tener una pizca de empatía, cosa que ella no ha sabido tener.

Por otro lado tenemos a Sam, nuestro protagonista masculino. De él no os puedo hablar demasiado ya que lo que os cuente puede ser considerado spoiler porque no tiene punto de vista. Así que os contaré un poco sobre él y mi opinión general del personaje.

Sam es un personaje que es un buenazo al punto de ser bastante idiota. Hasta cierto punto del libro me daba hasta lástima, porque vivir una cosa así debería estar prohibido. Pero claro, luego la autora decide que la mejor solución para todo este drama es que él se culpe y que haga ver como que la infidelidad fue por culpa suya y no de ella... Y bueno, ahí ya me he terminado de bajar del barco. ¿En qué cabeza cabe creer que una persona que ha sufrido una infidelidad es el culpable? Porque eso es para hacérselo mirar seriamente. Y no contentos con que él se disculpe por haber provocado que ella tome una decisión tan terrible, también decidió culminarlo con un final feliz donde los dos terminan juntitos y queriéndose mucho. Lo único que me ha provocado ese final es angustia y mucha rabia porque Sam ha sido un bobo por aceptarla a ella de nuevo en su vida. Es que además en todo el libro se pasan de hipócritas, sobre todo el hermano mayor de este. Durante todo el libro va de buenazo tratando de mediar entre los dos para arreglar las cosas y hasta acusa a Sam de ser un cobarde por no afrontar las cosas como se debe... ¿Para luego descubrir que el tío se acostó con la novia de su hermano pequeño? ¿Y se cree con el derecho de darle consejos? Vamos, yo soy Sam y me cambio de hermano y de novia corriendo. Y los saco a los dos de mi vida para siempre, independientemente de las razones que tuvieran. 

En resumen, "Todos nuestros veranos" es un libro que tenía muchas ganas de leer luego de descubrir que había tan buenas opiniones de la historia. Además, a mí toda historia que tenga el cliché de friends to lovers ya me tiene completamente ganada. Necesitaba leer la historia y descubrir lo que me estaba perdiendo, lo que había al otro lado y qué era lo que tanto había gustado a los demás. Y hasta cierto punto lo entendí, ya que era una historia muy amena, divertida y hasta dulce... Pero entonces llegó ese final y se cargó toda la evolución que había existido hasta reducirlo a nada. La trama no es mala, de hecho tiene mensajes muy buenos que me tuvo con ganas de seguir leyendo hasta el final. Me gustaba que le diera tanta prioridad al crecimiento personal de cada uno o a cómo se iban conociendo siendo niños, porque eso también le dio peso a los sentimientos que iban creciendo entre los dos. Sin embargo, creo que se centró tanto en ese pasado que se olvidó de darle la misma prioridad a la recta final. Siento que todo ese conflicto, desde que se descubre todo hasta que se resuelve, pasa demasiado rápido y eso le quita por completo el realismo. Sin hablar de que de por sí tampoco tiene realismo que una persona perdone lo que aquí se perdona, al punto de romantizarlo demasiado. Los personajes eran un plus muy grande. Yo estaba muy enganchada con la trayectoria de los dos, con cómo se miraban y que se demostrasen tantísima confianza cada vez que hacían algo juntos. De hecho, algo que me sorprendió mucho es que le dieron mucha prioridad a los veranos que ellos pasaban juntos, a ver cómo iban creciendo de la mano para avanzar y ser capaces de dejar los miedos atrás. Me daban mucha ternura y hasta cierto punto estaba adorando su historia de amor que era de lo más adorable. Pero entonces llegó el final y con ello esa resolución que hizo perder total credibilidad en los personajes que hasta ahora me habían parecido tan humanos y llenos de vida. El romance me gustó al principio, hasta que llegamos al final y su trayectoria se volvió tóxica y dependiente a unos niveles casi enfermizos. No me gustó que fueran incapaces de dejar ir las cosas por el bien del otro, porque sinceramente yo no veo salida a una relación que ha vivido las cosas que estos dos pasaron y que rompió de golpe toda su confianza. La pluma de la autora es el punto que más me ha gustado y es que para ser mi primera toma de contacto con ella ha estado bastante bien manejado. Creo que tiene un estilo muy ameno y sencillo de leer, al punto de que no te das cuenta de lo rápido que te pasan las páginas desde el minuto uno. Me habría gustado ver un poco más de desarrollo en el final, que hubiese más páginas para que al menos ese desenlace estuviera mejor ejecutado, pero dejando a un lado esos puntos concretos, creo que tiene una prosa muy propia para el verano y que se hace bastante ameno de leer (dejando a un lado la sobrecarga de drama al final que bajó bastante la esencia de la historia).

¡Y eso es todo mis pequeñas estrellas! Contadme, ¿habéis leído ya esta novela? Si es así, decidme qué os ha parecido a vosotros en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima reseña!



















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